Hipersociedad en Bogotá
En las últimas semanas de trabajo en Latinoamérica la actividad ha sido muy estimulante. Hemos logrado inaugurar nuevas sedes e impulsar nuevos proyectos que llevábamos meses empujando. Ahora ya estamos en el capital de tres startups tecnológicas latinoamericanas ubicadas en Miami, Chile y Colombia. Hemos estado en medios de comunicación y ofrecimos varias conferencias en foros muy interesantes. Destaca el último en el Colombia 3.0. Me quedo con tres cosas de esa sesión: compartir escenario con Burton Lee (profesor de Stanford y asesor de la NASA), disfrutar del sentido del humor de un tipo excepcional llamado Adolfo Corujo y lo dificil que es compartir espacio y tiempo con mi gran amigo Enrique Dans que tras recorrer medio mundo, unas miserables horas de diferencia entre los que vienen y los que se van no permitieron ni tomar un buen café colombiano. Os dejo con el material que ellos mismos editaron sobre mis comentarios en la conferencia y la entrevista derivada.
LA HIPERSOCIEDAD DE MARC VIDAL“Hoy la vida está cambiando, como todo cambiará en los próximos años”. Así arrancó Marc Vidal su presentación, al presentar una foto de un casete y un lapicero que representa el pasado.
Marc Vidal es un barcelonés de 39 años, experto en comunicación y creador de su primer fondo de Seed Capital vinculado a uno de sus proyectos IDODI LABS, analista económico especializado en Nueva Economía. Fue interim manager y consultor en modernización de compañías e internacionalización de empresas. Ha sido seleccionado una de las 10 personas más influyente de Internet en España. No obstante, si bien en su primera etapa su ocupación se centró en grandes compañías, ahora el denominador común de esta segunda etapa profesional es la de las start-ups, en especial en su primera fase de recorrido, el llamado ‘successful start-up’.
En su conferencia, indicó también que los modelos de distribución del trabajo y modelos del conocimiento son los que están revolucionando el mundo. “No darse cuenta de estos es un tremendo error”. Así mismo resaltó que el mundo quizas está agotado del consumismo y se pregunta: “¿Podemos obviar lo que está pasando o aceptar que el mundo está cambiando?”.
Con estos cuestionamientos, Vidal profundiza en los nuevos retos del mundo digital. “Hay aplicaciones que son capacez de cambiar el mundo, estamos hablando de cambios simples, pues el cambio económico no es determinante, sino pequeños cambios van determinando la nueva economía”.
Aconsejó a quienes tienen empresas, no preocuparse por qué dicen de ellos, sino que dirán, pues los emprendedores cambian el mundo. Esos cambios son los que definen la nueva sociedad.
Vidal asegura que las ideas son lo que mueven este planeta, “sin ideas no hay hipersociedad, no hay sistemas y modelos de distribución del trabajo. Gracias a las ideas el mundo local se convierte en global”.
Además explica que la hipersociedad ataca un elemento clave: la propiedad emergente, si intercambiamos ideas, nos llevamos más de las que puedo construir. Pensar en común es algo que se puede hacer de manera aterritorial y atemporal.
El talento global se reproduce en ese escenario de emergencia. Ese talento son ideas conectadas que permiten que la sociedad sea mejor.
“Yo soy optimista pues creo que el mundo va mejor a pesar de lo que dicen”, indica Vidal, en medio de su explicación sobre la hipersociedad.
Para concluir, señaló que hoy la sociedad cuenta con un radar sociocompartido. Además indicó que cuantas cosas sucederían si todos nuestros cerebros se interconectaran para crear una hipersociedad.
Hizo un ejercicio preguntándole a los asistentes de su conferencia cuál es la mitad de 13? luego de varias opciones de lo que puede ser la mitad de trece demostró que las cosas son como cada quien las ve o las quiere ver.
Para terminar dijo: “34 gigabytes de información diaria recibe nuestro cerebro. En una década esa cifra se multiplicará , la pregunta es: ¿estamos preparados para esto?”. Vidal indica que las micropymes, cada uno de los emprendedores deben dejar de competir en el mismo escenario que hasta ahora. Hay espacio para un nuevo juego y cada uno de nosotros estamos para inventarlo. Para terminar, resaltamos la columna que Vidal publicó en su blog sobre esta conferencia.
Y esta es la entrevista resultante al terminar la conferencia.
“LAS COMPAÑÍAS DISCOGRÁFICAS NO SE HAN DADO CUENTA DE QUE SU MODELO DE NEGOCIO MURIÓ”: MARC VIDAL
Durante su participación en Colombia 3.o, Marc Vidal se mostró carismático y además de enseñar, divirtió a la audiencia con sus relatos. Comenzó con una anécdota: hace 21 años escribió una carta para sí mismo en la que hablaba de sueños y retos, la cual abrió en mayo del año pasado. Al leerla se dio cuenta de que la persona que le hablaba era alguien que no conocía, hablaba con otro vocabulario, incluso grosero. Él no se imaginó que existirían los ‘smartphones’ y que el mundo sería tan distinto al de entonces.
Aunque la conferencia tenía que ser encaminada hacia el e-commerce, Vidal mismo escribió en su blog que el título era solo una fachada porque en realidad quería era “exponer es como todo ello ha sido afectado por un nuevo modelo de transmisión del conocimiento“.
Actualmente se vive la revolución digital, y están sucediendo dos revoluciones al mismo tiempo: la del modelo de distribución del trabajo y la de los modelos de producción del conocimiento, y si el mundo no se da cuenta de lo que está sucediendo “es un tremendo error”.
En esta Hipersociedad “todo va a cambiar, y en la comunicación también”. Porque vivimos en una sociedad gratuita y “es mejor trasmitir el conocimiento gratuito”, ya que gracias a esto se da la oportunidad, por ejemplo, de que Marc Vidal estuviera en Corferias dando una charla. Si no fuera por sus libros en línea, serían pocos quienes lo conocerían.
Después de abordar diferentes temas, tan variados que parecería que no tenían relación, como la economía relacional, el talento global, de cómo Facebook no fue inventado por Marck Zuckerberg sino en el neolítico y de por qué saltan los pingüinos al mar, Marc Vidal nos concedió una breve entrevista antes de dirigirse al Ministerio TIC.
¿Cuál es su opinión sobre el potencial de Colombia en el negocio de los contenidos digitales?
Colombia está en un punto concreto en el que puede aprovechar precisamente la ventaja adquirida en estos últimos años con respecto a su entorno, está por delante de otros países en el uso de la tecnología digital y evidentemente de la gestión de ese contenido.
La oportunidad no durará mucho, es decir, estar ahí como posible abanderado del cambio tecnológico en la zona, durará el tiempo que dure. Creo que Colombia está en la posición de salir con algo de ventaja y que para ello debe estar bien asesorada, tiene que rodearse de quienes ya han hecho ese proceso y de quien ya se ha equivocado en ese proceso.
No me estoy vendiendo a mí, sino a aquellos que sí que saben dónde están los errores, para que eso no suceda en Colombia. En estos nuevos tiempos, en la nueva Hipersociedad los períodos son muy cortos, la capacidad que tenemos de racionalizar las cosas que pasan es más escasa, tenemos que ser capaces de trasformarnos de una manera más rápida.
Ya que lo menciona, ¿cómo percibe al resto de la región en ese tema?
Bien. Latinoamérica tiene una particularidad que no se produjo ni en Europa ni en Estados Unidos, y es que ha adquirido antes prácticamente que llegase ese contenido, todas las herramientas para fabricarlo, es decir, aquí tiene todo el mundo un ‘smartphone’, la capacidad de penetración ha sido muy alta. El sentimiento, de que esa tecnología tiene un sentido es muy alto, pero lo que falta todavía es ese contenido de calidad y un contenido sobre todo que más que anecdótico sea fundamentalmente algo que genere valor.
El contenido por el contenido yo no lo defiendo, defiendo el contenido de valor, que cuando se cree un contenido digital sea para complementar mejor la sociedad, y para ello hay una serie de elementos que Colombia como cualquier otro, debe ser capaz de reconocer, como el talento global, la inteligencia colectiva, las experiencias compartidas y en sí mismo el pensar en común.
Hay expertos que pueden ayudar a Colombia y otros países a que eso suceda, pero fundamentalmente es un cambio generacional, de conducta y de actitud.
¿Cuáles son las tendencias del consumo del consumo inteligente?
Básicamente consumos digitales, es decir, la sociedad que se rige en entornos digitales lo que consume es eso. Que puedan mostrar conocimiento, que les ayuden a aprender diferentes cosas, a mejorar sus productos. En estos momentos vivimos un momento de la historia en el que la idea del que fabrica es más importante que la cosa que se fabrica, y eso es una de las esencias principales.
Todo está cambiando y no darse cuenta es un error. ¿Qué consecuencias trae el hecho de no darse cuenta del cambio?
No darse cuenta de que todo está cambiando tiene un mal acabar. Por un lado, evidentemente la no prosperidad, el no entender las oportunidades empresariales. El no aceptar esos cambios de forma profesional sería no ser capaces de afrontar las posibilidades de modernización de un país y no aceptar ese momento actual es empobrecer intelectualmente a la sociedad.
¿Cómo darse cuenta de los cambios? ¿Quiénes deben hacerlo primero?
Debemos darnos cuenta los que nos dedicamos a esto, los primeros somos los ciudadanos, los que nos dedicamos a usar ese entorno nuevo natural para generar valor, es decir, los que tenemos la responsabilidad, los emprendedores en gran medida, de aceptar esos cambios.
Somos los que tienen que arriesgar. Luego están las grandes compañías, han de ser capaces de apostar por los nuevos emprendedores en la medida en que ellos puedan ayudarles a producir cosas mejores y luego la política, los gobiernos, han de ser capaces y han de ser líderes en ese proceso. Tienen que ser capaces de entender esto no como un estatus electrónico o como una moda, sino como el verdadero modelo de cambio de su país, han de liderarlo y estimularlo, no es necesario que lo subsidien pero sí estimularlo, han de ayudar a que eso suceda.
Vivimos en una sociedad gratuita, pero parece que cada vez más se quiere monetizar algunos productos digitales (libros, películas, programas). ¿Por qué no es una tendencia generalizada?
Bueno, porque tienen que esforzarse en salvaguardar su modelo de negocio. No se han dado cuenta, en su mayoría, de que vivimos en una sociedad gratuita, y por eso lo aguantan.
Las compañías discográficas, las editoriales, no se han dado cuenta de que su modelo de negocio murió y en estos momentos esforzarse en que el costo que tiene escribir un libro y llevarlo a la venta no puede ser el mismo ahora que antes, porque antes requería una distribución, una tienda, una imprenta, una serie de elementos que en la cadena de valor incrementaba el costo y el precio.
Ahora mismo yo escribo un libro y lo pongo a vender en la Red, y no necesito a nadie, y la campaña me la hace la propia Red. Tienen que entender que su valor añadido ya no es el que era, ¡es un error!
Para quienes quieren conocer más a fondo las ideas del español, en su propio blog Marc Vidal compartió los planteamientos que plantearía en su conferencia en Bogotá.