Hablando en 'Microsoft Sessions' de oportunidades competitivas en la transformación digital.
Ayer se emitió para Latinoamérica la Jornada ’10 ways Microsoft can help’ que se enmarcaban en una de las Microsoft Sessions que se desarrollan regularmente y en la que tuve la oportunidad de participar. La filmación tuvo lugar en Fort Lauderdale al norte de Miami. Junto a mi estuvieron Vanessa Olcese, de Marketing para Latam, Hugo Santana, gerente general para clientes y Tyler Bryson, uno de los vicepresidentes de Microsoft.
Ayer se emitió para Latinoamérica la Jornada ’10 ways Microsoft can help’ que se enmarcaban en una de las Microsoft Sessions que se desarrollan regularmente y en la que tuve la oportunidad de participar. La filmación tuvo lugar en Fort Lauderdale al norte de Miami. Junto a mi estuvieron Vanessa Olcese, de Marketing para Latam, Hugo Santana, gerente general para clientes y Tyler Bryson, uno de los vicepresidentes de Microsoft.
Se me pidió que analizará la situación económica en Latinoamérica en su contexto actual y cómo está afectando una profunda recesión que vive la región en su conjunto, que reflexionara sobre el momento tecnológico que estamos viviendo globalmente y cómo los clientes y directivos de Microsoft pueden afrontar el reto de transformarse digitalmente y lograr ventajas competitivas con ello, que hablara sobre donde se detectan ventajas competitivas para Latinoamérica y, finalmente, sobre ¿cómo tomar ventaja a medida que llega el tsunami de la 4ª Revolución Industrial?
La situación económica de Latinoamérica
El crecimiento que ha disfrutado la región durante el período 2003-2011 fue inédita en su conjunto. Cinco años de parón económico no lineal que se debe contextualizar correctamente. Ahora la región se encuentra en recesión técnica en diversos países y en otros con crecimiento casi nulo debido a una reducción de la demanda global, de un bajón de los precios de las materias primas y de una reducción de la entrada de capital internacional. Estos factores nos indican que se deben buscar alternativas de tipo tecnológico y de cambio de modelo productivo en muchos de estos países.
Latinoamérica está entrando en la Cuarta Revolución Industrial algo más tarde que otros puntos del planeta. Como he dicho, el Foro de Davos la describió recientemente como la mayor transformación económica que ha vivido la humanidad en su historia. Esto precisa de estrategia, de líneas de actuación, de liderazgo político incluso.
En paralelo a su propia transformación tecnológica, Latinoamérica (especialmente México, Colombia, Chile, Costa Rica, Argentina y Ecuador), está trabajando en la buena dirección en aspectos más analógicos que pueden, en breve, cambiar la tendencia los grandes índices económicos.
Estos aspectos que se están empezando a tratar y que precisan de una decidida apuesta se refieren al reajuste de las cuentas externas para evitar dependencia de materias primas, al mantenimiento equilibrado de la inflación en algunos países clave, al buen manejo del espacio fiscal adaptándose a ingresos más ajustados, al impulso decidido por la inversión para la innovación y al aumento de la productividad gracias a la formación de la base laboral.
Y a todo esto era importante reseñar donde se ubica el contexto general y global. Explique conceptos que ya hemos comentado muchas veces estos últimos años, que suelo explicar en mis conferencias, cursos o que detallaré en mi próximo libro para contratado para Planeta. Especifiqué que, a esto que vivimos, algunos le llaman ‘Crisis’, cuando eso es tan sólo el resultado, los síntomas, de algo mucho más complejo. Son los síntomas, reales y crudos, de una Revolución, la 4ª Revolución Industrial, que ha empezado recientemente y que nos ocupará varias décadas todavía. Realmente no vivimos una época de cambios, en realidad vivimos un cambio de época y su característica principal es ‘la transformación digital’
Transformación Digital para afrontar la Cuarta Revolución Industrial.
El hombre cuando vive una Revolución económica, industrial o tecnológica, suele llamar a esa época Crisis. Ya pasó en otros momentos de la historia. Nuestra Revolución es Digital, donde una sola tecnología lo ha modificado todo como nunca antes ha sucedido. Hemos pasado de la Internet Técnica (1993) a la Internet Empresarial (2001), después a la Internet Social (2006), venimos de la Internet Automática (2011), estamos en la Internet de las Cosas (2016) y pronto vendrá la Internet del Todo (2018).
Hemos pasado de ‘producto a servicio’. ¿Que quiere decir esto? Cosas que se describen en muchos blogs y conferencias de grandes analistas como que: la compañía de taxis mas grande del mundo no tiene taxis: Uber. La compañía más grande de alojamientos no tiene ni un solo hotel: Airbnb. La empresa más grande de telefonía no tiene infraestructura propia: Skype. La mayor empresa de retail del mundo no tiene inventario: Alibaba. La mayor empresa que posee más contenidos del mundo no crea contenidos: Facebook. El banco que más crece no tiene dinero: SocietyOne. La empresa de cines mas grande del mundo no tiene ni una sala: Netflix. La prensa se lee en la red, los viajes se gestionan en la red, el cine se ve en la red, las operaciones bancarias se formalizan en un smartphone, la música se escucha como un servicio, ya no como un producto. Eso es irremediable y va en una sola dirección.
Escenarios donde se detectarán las ventajas competitivas.
En base a esa situación, una vez entendido el momento, las ventajas competitivas para una empresa radica en la automatización de los procesos para la eficiencia, en la destrucción de empleos que deban sustituirse por otros aun inexistentes creándolos lo antes posible, en los mercados líquidos donde productor y consumidor se mezclan, en la reducción de intermediaciones gracias a la reducción de la cadena de valor, en la gestión de datos, análisis de datos y Big Data, en la aceleración de procesamiento de la información (sabiendo que en la implementación del Big data se posibilita que la información interna pase de ser procesada de 12 horas a 2 segundos) y en la interconexión de objetos y ‘beacons’ en una Internet Global.
Es importante entender que las tecnologías digitales valen menos por separado, pues incrementan su valor cuando se conectan a la información de la compañía e interactúan entre ellas de manera automatizada. Cuanto más procesos robóticos en la comunicación, en la gestión y en el análisis, mayor será el grado de competitividad obviamente. No hay otra. Debemos asesorarnos en ese cambio y en ese proceso, alguien tiene que acompañar a los directivos en el cambio de mentalidad y a ejecutarlo en el modelo de gestión.
Finalmente, durante toda la jornada, pudimos hablar y analizar aspectos que a Microsoft les interesaba especialmente. La oportunidad histórica que supone todo esto. Ellos mismos, ayer, presentaron novedades increíbles en el Build2016 sobre comunicación y holografía sintética por ejemplo.
Creo que aceptar los retos para los responsables y directivos de las empresas de América Latina como valor competitivo es fundamental. Es importante que los gerentes de líneas de negocio ya no vean la transformación digital como algo opcional. Las compañías que no la hagan quedarán atrás o completamente fuera del mercado.
La idea es no quedarse atrás. En 2017, uno de cada tres CEOs de las 3,000 compañías más grandes en la región pondrán la transformación digital como base de su estrategia corporativa.
Es importante asumir que éste no es un problema adaptativo sino técnico. Cuando el problema es de adaptación no conocemos el problema y por lo tanto tampoco la solución. En este caso es un problema técnico, conocemos el problema y también la solución y se trata de digitalizar, automatizar y cambio de mentalidad.
El camino que recomiendo cuando nos contratan para llevar a cabo este tipo de consultorías o procesos de cambio en empresas se basa en responder una pregunta: ¿Cómo puedo tomar ventaja a medida que llega el tsunami de la 4ª Revolución Industrial, también llamada Revolución Económica 4.0?
Nuestra respuesta es optimizando la inversión en Cloud. Esto permite empoderar a los empleados accediendo a conocimiento y recursos y generando valor con seguridad, buscando la automatización de procesos con software eficiente, comprendiendo al cliente con datos puesto que ‘la transformación digital no consiste en preguntarse qué quieren los clientes sino en comprender qué hacen los clientes, activando la fuerza Mobile de tu compañía puesto que el 70% de las transacciones que se realizan hoy en día en Latam son vía dispositivos móviles y mejorando los procesos de formación continuada y digitalizada para trabajar en red de un modo mucho más eficiente.
A mi modo de ver tenemos un compromiso que va más allá de la economía, tiene que ver con el reto histórico que nos ha tocado vivir en cada área de responsabilidad que todos tenemos. Se trata de querer vivir este momento histórico. Se trata de querer ser protagonistas de uno de los cambios sociales, culturales y económicos más intensos que se han vivido jamás. En el mundo hay dos tipos de directivos, como de personas: los que abrazan los retos y los que se conforman. Los tiempos que vivimos no son fáciles, nunca es sencillo un proceso de cambio disruptivo como el que he descrito, pero este es uno de los más fascinantes que hemos vivido como especie.
Me gusta terminar mis conferencias con una metáfora. Al igual que las cometas cuando vuelan, si el viento es contrario a ellas, vuelan mucho más alto. Como responsables de empresas que quieren sentir el valor de transcender, de convertirse en las más importantes y de hacerlo en plena revolución tecnológica, para obtener a medio plazo grandes ingresos, en Latinoamérica especialmente toca volar contra el viento, seguramente al final volarán mucho más alto.
El futuro no es gratis
A veces nos preguntamos porqué unos viajan a la velocidad de la luz y otros a la de un carro de trotones. Hay naciones que pasaron de sumergidas a emergidas sin apenas darse por aludidas cuando las denominaban ‘emergentes’. Otras no se dan por señaladas cuando sencillamente se han hundido. El ser más o menos en el panorama internacional tiene ya poco que ver con lo que fuimos, con lo que decimos ser o con lo que nuestros dirigentes insisten aseguran que seremos.
Es ridículo poner el adjetivo ‘valley’ a todo recinto que desarrolla tecnología aunque esta aporte poco o nada al conjunto de la economía donde se encuentra. Digamos que, por mucho ‘valley’ que le pongas a un polígono industrial o a un campus tecnológico, no lo conviertes en un polo de atracción para las grandes innovaciones o los grandes desarrollos.
Hace falta mucho más. Para empezar que alguien se lo crea. Los pilotos de la innovación conducen startups. Muchos de ellos no lo hacen bajo el flujo de la tecnología más avanzada del planeta, ni tan siquiera necesitan grandes computadoras que procesen sofisticadas ecuaciones infinitas. Hablamos de emprendedores que utilizan lenguajes de programación simples, ideas sencillas y paradigmas disruptivos. Uber no deja de ser una idea que rompe con estereotipos, no es una máquina tecnológica que colisione con la teoría de la física cuántica.
Blablacar, Airbnb, Twitter o el mismo Facebook, cualquier App doméstica, miles de desarrollos influyendo en nuestra vida cotidiana, aplicaciones domóticas, matemática computacional basada en algoritmos tradicionales, analistas de procesos que ordenan el mundo con tecnología existente pero bajo otro prisma, impresoras 3D que marcan dinámicas de producción o ‘drones’ que nos explican donde va la futura cadena de valor comercial. Sin necesitar a científicos candidatos al Premio Nobel, estamos con empresas que nacieron bajo la influencia de un ecosistema de desarrollo y de pensamiento distinto.
Hay universidades, investigadores, diseñadores, venture capitals, consultores, ingenieros, científicos, comunidades, innovadores, creativos y líderes políticos que deberían ponerse en marcha en su conjunto y acelerar la máquina que, por comparación con otros lugares, parece parada. Líderes de innovación empresarial, emprendedores comprometidos con la innovación y políticas públicas capaces de estimular tanto talento que, estoy seguro, se desvanece a nuestros pies.
Pero solamente en algunos países logran que estos elementos se despliegan logrando un impacto determinante en la vida económica de su entorno. Hoy en día es fácil distinguir a los países que apuestan por el futuro real y los que lo simulan. También a esas instituciones financieras o semipúblicas que se ofrecen a estimular al tejido emprendedor o al desarrollo tecnológico y tras publicar una cifra récord de beneficios trimestrales que ronda los tres mil millones de euros, ofrecen un programa de apoyo a los emprendedores de diez. Y hacen publicidad y todo que les cuesta uno.
Hay países, remotos o no, donde se ha entendido que el emprendimiento (y tecnológico) son motores reales de competitividad económica y de cambio social. Los paises que simulan tanta innovación pero que nunca arriesgan son las que suelen definir todos sus ‘parques tecnológicos’ como el ‘x’ Valley de turno.
Llamar a según que lugar el ‘Sillicon Valley’ de la zona ‘X’, a parte de ser ridículo es un problema de concepto pues, quien quiera innovar y de verdad para modificar los procesos sociales y económicos e influenciar en el futuro deberá crear su propio modelo basado en la eficiencia y en el gasto real con sentido. Hay que invertir e invertir en startups, tecnología y valor añadido. Quien se detenga o dude en hacerlo deberá contemplar el futuro desde las filas del fondo.
Quiero señalar la noticia que se ha publicado estos días acerca de que el gobierno de India ha explicado que destinará algo más de 1.600 millones de dólares exclusivamente para invertir en startups. Igualito que en España y sus 35 millones. A pesar de que la India es gigantesca y que su potencia se intuye de cara al futuro, cabe establecer su economía actual con respecto, por ejemplo a Europa. El PIB en 2013 del país asiático fue de 1.408.457 millones de euros y el de España, por ejemplo, de 1.023.000 millones. Los cuadros comparativos no son tampoco tan extraordinariamente distintos por cierto.
Resulta que como parte del presupuesto del año 2014, el gobierno de India anunció que destinará esos 1.600 millones a las empresas tecnológicas que florecen en su país. Lo que parece extraordinario no lo es tanto allí. Esta inversión es la continuación varios centenares de millones que en los últimos años se llevan invirtiendo para liderar, desde las instituciones, la estimulación de ese cambio.
El gigante asiático es uno más. No es el único que ha decidido aprovechar la oportunidad que los nuevos tiempos ofrecen a los que, con liquidez, afrontan el reto de construir un futuro tecnológico, económicamente más competitivo y tremendamente estimulante. Cambios sociales, nuevas tendencias, eliminación de elementos laborables que ahora son un lastre socioeconómico en esos países se irán convirtiendo en algo mejor. Poco a poco el nuevo mundo se va vislumbrando y, exceptuando a Estados Unidos, el resto del escenario está siendo vendido a nuevos actores.
Hace unos meses que una de nuestras empresas opera en Nigeria. En el proceso mismo de creación del proyecto de internacionalización hemos visto que de las dificultades surge el conocimiento y el respeto, pero también que, en los casi dieciocho meses que llevamos gestando esta operación, la velocidad con la que, en este caso el gigante africano, asumen y digieren la tecnificación y la tecnología asociada es brutal. Cabe también hablar a parte de las enormes inversiones que se hacen desde los dirigentes públicos y privados que, en muchos casos, se han formado en las grandes universidades del planeta. Un país y un continente más a tener en cuenta si queremos ser globales.
En Latinoamérica, al contrario y asistiendo a mi propia experiencia, se puede estar perdiendo la mayor oportunidad de la que ha gozado ese continente. Existen iniciativas para acelerar los proyectos tecnológicos, pero se diluyen lamentablemente al no existir apoyo real y consideración por parte de los gobiernos. Hay mucha publicidad implícita en muchos países de estos y poca creencia real del costo que tendría. En algunos casos me recuerdan a Europa, a España especialmente. Durante los años de bonanza en los que el dinero rebosaba por las cañerías se hizo nada o muy poco por las grandes ideas, por la innovación, por la creación real de empresas de hilo tecnológico, por la nueva economía por la realidad futura y si se hizo mucho por las obras inservibles, por lo monumentos a la idiotez y por la hipoteca puente interminable. Poco por la formación y mucho por las vacaciones, el Chayenne y la tele de plasma implícitos en la hipoteca renegociada gracias al nuevo y extraordinario valor de la vivienda familiar.
Si bien la mayor parte del capital indio se proporcionará en manera de préstamo, India acaba de poner el listón bastante alto en eso de apoyar a los emprendedores tecnológicos. Ha dejado en ridículo cualquier idea que se tenga de los centros tecnológicos Latinoamérica o de Europa.
El equilibrio de los sueños
Conozco soñadores que me inspiran cada día. Algunos ya son amigos por cuanto nos une. Siempre he pensado que la voluntad de montar negocios como elemento de reto y sueño a perseguir comporta al “emprendedor dreamer“ de una morfología particular. Se diferencia de otros individuos por ser creativo en mayor o menor medida, disponer de una gran intuición e incluso, si fracasa, dispone de un grado de optimismo patológico que puede perfectamente mezclarse con un espíritu crítico y analítico de la realidad. Un soñador, un emprendedor de los que persiguen sueños, no es un iluso, es un valiente que decide tirarse por un acantilado sin saber, muchas veces, que le espera allí abajo, pero siempre con algún factor que le permite convertir ese vuelo en un apasionante escenario de aprendizaje. Para ello aconsejo, sin utilizar red, procurar un buen paracaídas en formación, experiencia, socios, equipo o lo que sea, pero el “saltar por saltar no es el camino, es un suicidio muchas veces”.
El emprendedor tiene un ADN compuesto por empuje, decisión, observación y energía para soportar los temporales que se encontrará en su camino. En España, además, el emprendedor suele tener dos características más: la paciencia para tolerar la pesada administración pública y su burocracia, y la inconsciencia bien entendida para sobrellevar el riesgo de exclusión si te arruinas en un país como el que nos “ocupa”.
Estoy algo agotado de ser el “motor de cambio imprescindible”. Me gustaría destacar que no solo de los emprendedores es la tarea de mejorar nuestro entorno, tiene que ver con muchos otros elementos sociales. La multitud es el todo y es quien debe poner en marcha los resortes del cambio. Los gobiernos y los poderes políticos, públicos, financieros y privados, todos son la clave, pero la sociedad en su conjunto, emprendedores y emprendidos, todos adeudan ese impulso hacía un futuro más equilibrado y activo, donde ser concursante de Gran Hermano no sea el objetivo de millones de jóvenes porque consideran que siendo famoso la vida será más fácil.
No solo de emprendedores va esto que escribo (reduzco), también de todo lo que conlleva estimular cambios de conducta para tomar las riendas de tu propia vida, seas o no empresario, joven o anciano. No hablamos de estereotipos, pero sí de actores. Hay personas que han nacido con una actitud en la vida que los posiciona como agentes de cambio, otros que se ven impulsados a ello.
La mal llamada crisis debería despertar en muchos ciudadanos su inquietud por emprender. Este momento, aparentemente poco propicio para poner en marcha proyectos, es uno de los más complejos por los que pasará la mayoría de las generaciones que les ha tocado vivirlo. Con un endurecimiento del crédito, sin dinero público para invertir en reflotar la economía, con el consumo cayendo y sin expectativas de mejora, el horizonte no parece el más brillante para los que han decidido arriesgarlo todo por una empresa. No es cierto, no te dejes engañar.
Equipo para México
De nuevo acabamos de llegar de América. Durante tres semanas hemos visitado las sedes de nuestra empresa en diferentes capitales latinoamericanas. La última fue México DF, de cuya estancia os hablaré en un post más adelante por cuanto allí vivimos y aprendí. Sin embargo, debido al potente crecimiento de nuestro proyecto en la capital azteca os dejo otra oferta laboral calentita que aun ni siquiera ha llegado a nuestra web.
Buscamos para DF un Social Media Strategist con experiencia previa demostrable como Community Manager y que resida en México o esté dispuesto a hacerlo en breve. Sus funciones iniciales serán un híbrido entre CM y SMS a fin de ir ampliando el equipo que llevará la comunicación y estrategia de nuestra empresa.
Descripción:
Interlocución directa con el cliente.
Apoyo al departamento comercial.
Creación de planes estratégicos en redes sociales.
Gestión de equipos en la implementación de acciones digitales.
Confección de informes de monitorización y reputación.
Redacción de informes de seguimiento del proyecto (indicadores cuantitativos y cualitativos).Requisitos:
Experiencia en gestión profesional de redes sociales, una agencia interactiva o en consultoría estratégica.
Ser un entusiasta del marketing y de la realidad digital.
Tener conocimientos de gestión y estrategia profesional de redes sociales.
Haber trabajado herramientas de medición y reputación en redes sociales.Se valorará:
Comprobada capacidad de escritura y habla fluida
Estudios en Marketing y Comunicación
Cursos específicos en Community Management
Experiencia demostrable en puesto similar mínima 2 años
Conocimientos básicos de diferentes CMS (WordPress, Joomla, Drupal)
Rapidez de respuesta y adaptación a las necesidades.
Habilidades comunicativas. y comprensión del funcionamiento de la lógica de redes sociales.
Amplia presencia en Redes Sociales desde sus inicios
Conocimiento de todas las redes influyentes en todo el territorio nacional.
Experiencia en agencias de publicidad, empresas 2.0, grandes empresas.
Se valorará experiencia anterior en empresas de nuevo desarrollo (Start Up).Condiciones:
Tipo de contrato: 6 meses + Indefinido. Legislación Mexicana.
Horario: Laboral por convenio mexicana.
Sueldo: A negociar con Filial en DF.
Interesados pueden ponerse en contacto con nuestro Director en DF, Oscar Espinosa
Lo que estoy aprendiendo
En estos días estoy pudiendo comprobar de primera mano muchas de las cosas que con mi equipo hemos discutido meses antes. En apenas una semana ya he visitado tres países y hemos podido escuchar y atender a decenas de periodistas especializados, usuarios aventajados y primerizos en esto del uso del comercio electrónico. Ver y escuchar lo que dicen de nuestros productos. No os imagináis lo que estamos aprendiendo. Descubrir como la “user experience“ puede ser tan diversa pero tan sofisticadamente exacta a veces permite establecer estrategias comerciales y de gestión de una manera mucho más eficiente.
Siempre quise tener lo que tengo ahora. Un equipo versátil, rápido, multitarea y capaz de entender que los límites son lo que tu te impones y no los que tu trabajo define. Además, ahora, más que nunca percibo que alguna de las premisas que impuse desde el principio en nuestros productos de ecommerce tenían sentido. Corregir, mejorar, modificar y poderlo hacer en el plano de la programación a tiempo real es un lujo que nos está dando la posibilidad de dar pasos a una velocidad muy superior de la que muchos esperaban.
https://twitter.com/marcvidal/status/380414488635514880
La oportunidad estaba donde deduje que se encontraba. Allí vamos y con la misión de acercar el comercio electrónico, la simplificación de las herramientas y la capacitación de cualquier usuario para que pueda vender online. Sin estridencias tecnológicas, pero con una hoja de ruta comercial muy clara y bien desarrollada. Vivimos una oportunidad y un punto de inflexión a nivel empresarial pero también a nivel social. Resulta que sólo apreciamos el valor de las oportunidades cuando miramos al pasado, que el auténtico desafío consiste en aferrarse a ellas cuando pasan y comienzan a tirar de ti camino de un futuro incierto. A partir de ahí, mientras tanto, debemos observar el pasado desde nuestro espejo retrovisor para, paradójicamente, no perder de vista tu rumbo. Recordar los pasos ya dados para conocer el sentido de los que daremos en el futuro inmediato.
Estos días en el blog de uno de esos productos analizamos los valores de conversión en los procesos de venta. Estamos estudiando como y donde incidir pues no es lo mismo este escenario de abandono de un “carrito de la compra digital” en Medellín o en Santander, pero sin embargo, vemos gracias a los equipos que tenemos en más de una docena de países que hay elementos transversales. Esos son los puntos que hacemos converger en las mejoras de estos productos.
Es interesante destacar que lo que llamamos conversión es el proceso por el cual conseguimos una venta. Hoy en día la media de abandonos del carro de compra ronda el 65,23%, pero entre el deseo o necesidad de compra y la renuncia hay multitud de factores correctores que pueden desnivelar la balanza en uno u otro sentido.
El mundo offline tiene la ventaja del feedback inmediato. Podemos determinar si perdimos o no una venta y a causa de qué, intentar corregir y volver a intentarlo. Podemos entender si nuestra política de atención al cliente o incluso de precios es adecuada o no. Teniendo en cuenta que salvo momentos de necesidad la media de visitas hasta la compra “days to purchase” está entre 3 y 5 visitas podemos hacernos a la idea de la dificultad y de lo bien que necesitamos conocer y tratar a nuestro público.
Tal vez no tengamos la información del trato personal pero hay muchos “insights” que nos pueden ayudar a la hora de crear páginas que realmente venden.
En el blog de openshopen, el equipo de investigación en ecommerce va a enumerar en interesantes artículos algunos de los puntos elementales para reducir esa pérdida de conversión y como mejorar algunos de los puntos que establecerían más opción de venta. Imprescindible para amantes de las métricas, las ventas y el estudio del comportamiento globalizado y localizado.
Si estás pensando montar tu negocio online, si has decidido dar la vuelta a esta colcha infecta que supone esperar que te lo den todo hecho, si has tomado la decisión de emprender algo a nivel digital, no lo dudes, hazlo. En mi caso te ofrezco una herramienta gratuita para que lo hagas, hay más, no te preocupes si te convence alguna otra, no me estarás “traicionando”, pues espero que, en la comparación descubras que mi plataforma se ajusta (o se puede ajustar) mejor a tus necesidades iniciales.
Recuerda que si miramos hacia atrás nos daremos cuenta de que el mundo ha cambiado, la forma de relacionarnos de comunicarnos y de hacer negocios. Las oportunidades nos están adelantando y llevan el turbo encendido. Hace unos años también escuche decir a comerciantes del sector textil que nadie compraría una prenda de vestir por internet, música tal vez, pero no algo que requería ser tocado, probado e incluso a veces olido. No diré que se equivocaron, simplemente no tomaron la oportunidad. La transformación de los productos físicos en algo que va mucho más lejos pone bajo el sentido de lo que se puede comerciar o no por internet absolutamente todo. Bajo el paraguas del comercio electrónico tiene refugio cualquier sector.
Hoy, la oportunidad está pasando por nuestro lado, el comercio electrónico ha venido para quedarse, crecer y transformarse. Ya es algo absolutamente transversal a nuestra forma de hacer negocios por internet. Las cifras de crecimiento en ventas de estos mercados crecen exponencialmente año tras año. Ya sean mercados locales o globales dejar de lado este modelo supone que tu vecino, tu competidor, incluso alguien que vive a 9.000 km de distancia lo tome y compita contigo.
Hoy nos vemos en Lima.
https://twitter.com/marcvidal/status/380414001089642496
Desde Latam otra vez
Estos días estamos trabajando muy duro en la presentación de nuestros productos tecnológicos en algunos países latinoamericanos. De la mano de nuestros directores locales y sus equipos vamos poco a poco viendo como se aceptan y como entra en el mercado el resultado de tantos meses de trabajo. Es algo muy emocionante y más cuando notas que lo que estás presentando no sólo está muy bien hecho, sino que además quienes lo han hecho posible lo sienten como suyo. Tanto Openshopen, que está siendo recibido con entusiasmo por la combinación entre sencillez y robustez, como ebnto y emailfy, nuestro reto siguen cumpliendo etapas en esta primera fase de lanzamiento.
Estamos recorriendo Costa Rica, Perú, Panamá, Colombia, México y Estados Unidos. En breve regresaré para ayudar a los equipos de Idodi en Ecuador, Chile, Venezuela, Argentina y Brasil. Es fascinante descubrir que, a pesar de ser muy difícil y duro entrar todavía en algunos entornos de baja presencia en temas de comercio electrónico, las expectativas se nos plantean son muy altas.
Pero a Latinoamérica hay que venir a aprender. El error sería considerar que la hipotética ventaja tecnológica europea es la clave para vender más. Si piensas así no venderás nada. Lo importante es entender porque en un país como Panamá, por ejemplo, el crecimiento de usuarios de teléfonos móviles en 2010 fue de un 184,7 por cada por 100, superando incluso a países como Alemania que contaba con 127 por cada 100 habitantes. Panamá tiene 3,3 millones de habitantes y 7,3 millones de líneas de teléfonos móviles registradas, según la Autoridad Nacional de los Servicios Públicos. Lo que supone más de dos líneas por persona. Algo excepcional en el mundo.
Hemos decidido entrar en muchos de estos países de la mano de su gente. Hace más de dos décadas que vengo asiduamente y que trabajo con ellos. He visto de todo y he aprendido mucho de todos ellos. Tengo claro que nuestros productos son una respuesta real y efectiva y con los equipos locales que han modificado y adaptado todos ellos, estamos en condiciones de liderar algunos de estos mercados.
Si estás en alguno de los países que te descrito y te interesa lo que te he contado puedes ponerte en contacto con mi equipo a través de este enlace a fin de asistir a alguna de las ruedas de prensa que estamos ofreciendo o para concertar entrevistas de tipo periodístico o empresarial.
¿Idea u oportunidad?
Localizar una oportunidad es esencial. No sirve de nada una idea gran idea si no encontramos la rendija por la que convertirla en algo útil y rentable. En el libro que saldrá al mercado en octubre hablo de eso. Concretamente de como se puede tener una gran idea pero que si no logramos transformarla a partir de una oportunidad latente no aparece nada. Me llegan decenas de grandes ideas cada semana. Son emprendedores y soñadores pero pocos se adentran en la oportunidad. Lo viví y aprendí en París hace mucho tiempo pero me lo ratifica cada día nuestro trabajo en el resto del mundo, especialmente en Latinoamérica donde una idea puede estar bien, pero se precisa de otros factores para el éxito. Por ejemplo, nuestros desarrollos y servicios son muy buenos en su conjunto pero no venderíamos nada si las estructuras que IDODI tiene en esos países no nos dieran la oportunidad. Muchos no lo parecen creer pero la oportunidad está pasando por nuestro lado. El comercio electrónico ha venido para quedarse, crecer y transformarse. Ya es algo absolutamente transversal a nuestra forma de hacer negocios por internet. Las cifras de crecimiento en ventas de estos mercados crecen exponencialmente año tras año. Ya sean mercados locales o globales. Dejar de lado este modelo supone que tu vecino, tu competidor, incluso alguien que vive a 11.000 km de distancia lo tome y compita contigo. Os dejo con la diferencia entre idea y oportunidad de la mano del grupo de comediantes The Bilderbergers, de New York. La verdad es que es una metáfora muy bien traída para los que con un keynote sobre alguna invención consideran haber encontrado algo inédito y que va a hacer ricos a muchos, pero que, pudiendo ser algo extraordinario, se olvidan de la oportunidad en la que se apoyaría. Os dejo esto para reír un poquito el primer día de agosto. Summer time!
Miami Startup
Algunos lectores sugieren que escriba más a menudo posts que expliquen como es eso de emprender en otros países, como se puede desarrollar un proyecto tecnológico en otros lugares y, sobretodo, cuales son esos escenarios. Hoy me pararé un instante en uno de esos lugares en el que hace años tengo un enlace directo y en el que llevamos trabajando ya algún tiempo. De hecho es el segundo lugar donde más tiempo estoy. Me refiero a Miami. El motivo de esta apuesta es el mismo de siempre y muy parecido al que me tiene en Dublín. Estar cerca e implicado en ecosistemas propicios para las startups o las empresas tecnológicas. A pesar que hace tiempo esta macrociudad acribillada de puentes y cantantes vive en una extraña convivencia entre lo nuevo y lo de siempre, Miami está procurando convertirse en un hub internacional de tecnología. Os dejo un video que refleja la opinión de gente que se ha implicado en el proceso. Es interesante escuchar el tono optimista, entusiasta y colorista de la gente que opina, las imágenes del distrito de Wynwook y algunos de los espacios de coworking que la ciudad pone a disposición de cuantos quieren intentar perseguir sus sueños en esas tierras. Aunque la grabación busca promocionar un espacio concreto, el Miami Lab, una tipología exacta de emprendedores y un producto en desarrollo, lo que se puede identificar es como “nace” un ecosistema a partir de unos actores determinados.
A nível de reglas y normas, Florida está trabajando duro en la reducción de procesos y adecuación a los tiempos que vivimos. Lo que me interesa del método elegido por los actores principales que están liderando este proceso es la apuesta por una realidad histórica basada en el arte, la música, el diseño y lo cultural, mezclada con emprendedores y empresarios de alta tecnología. Últimamente pongo como ejemplo a Miguel Diez Ferreira que se instaló recientemente en Miami con su exitosa startup Redkaraoke. El potencial que se le supone a esta ciudad como capital del mundo hispano, como si en Miami se mezclara parte de lo USA con los canales de acceso a Latinoamérica, ya no exclusivo. Ahora también es un laboratorio que trata de lograr una mezcla perfecta de diseñadores y desarrolladores, hackers y los pintores, arquitectos y artistas gráficos y derivados.
A. Acceso La ciudad de New York, asegura que todos los neoyorquinos pueden acceder a Internet y tomar ventaja de las sesiones públicas de formación para utilizarla con eficacia. Se prestará apoyo a más opciones de proveedores para los neoyorquinos, e introducir Wi-Fi en las zonas más públicas. Conectar las personas con necesidades de alta a través de iniciativas financiadas con fondos federales de New York conectados. Campañas de divulgación y de educación para aumentar la adopción de banda ancha a Internet. Apoyo a todas las opciones de banda ancha que puedan existir en toda la ciudad. Introducir Wi-Fi en más espacios públicos, incluyendo los parques
B. Gobierno Abierto Al desbloquear la información pública importante y el apoyo a las políticas de un gobierno abierto, New York ampliará aún más el acceso a los servicios, facilitará la innovación que mejore las vidas de los neoyorquinos, y aumentará la transparencia y la eficiencia. Desarrollando la plataforma de New York, un marco de gobierno abierto con las API de datos de la ciudad. Lanzamiento de un eje central para la participación y el cultivo de la retroalimentación de la comunidad de desarrolladores. Introducir herramientas de visualización de datos que hacen más accesible para el público. Listas de intenciones para poner en marcha la aplicación que pueda soportar un ecosistema basado en las necesidades de innovación. Lanzamiento oficial de una ciudad de New York Apps.
C. Compromiso El Ayuntamiento mejorará las herramientas digitales, incluyendo NYC.gov y 311 servicios en línea que disponen para agilizar el servicio y permitir centrarlo en el ciudadano asumiendo el valor del gobierno en colaboración. Se ampliará la participación de los medios de comunicación social, implementando nuevas medidas de coordinación interna, y siguiendo en esa línea para solicitar la opinión de la comunidad de las siguientes maneras: Relanzamiento NYC.gov para hacer sitio Web de la Ciudad más usable, accesible e intuitivo. Expandir 311 en línea a través de aplicaciones de teléfonos inteligentes, Twitter y chat en vivo. Implementar un servicio de redirección URL bit.ly en NYC.gov para fomentar el intercambio y la transparencia. anzamiento oficial de la presencia en Facebook para involucrar a los neoyorquinos y la experiencia de personalizar. Lanzamiento @NYCgov, una cuenta de Twitter y el centro de la ventanilla única de noticias y servicios vitales. Poner en marcha una ciudad de New York Tumblr vertical, con contenido y comentarios sobre historias de la ciudad. Poner en marcha una tarjeta de identificación Cuadrangular que fomenta el uso de lugares públicos libres de New York. Integrar herramientas de crowdsourcing para situaciones de emergencia. Introducir Herramientas digitales para relacionarse con
D. Industria El gobierno municipal de New York, liderado por el New York City Economic Development Corporation, seguirá prestando apoyo a un dinámico sector de medios digitales a través de una amplia gama de programas, incluyendo el desarrollo de la fuerza laboral, el establecimiento de una institución nueva ingeniería, y un camino más eficiente para hacer negocio. Lo harán ampliando los programas de desarrollo laboral para apoyar el crecimiento y la diversidad en el sector digital
#latinoamerica
Hoy hace exactamente 20 años que viajé a Latinoamérica por primera vez por motivos de trabajo. Fue un pequeño trayecto entre Bogotá y Medellín. Recuerdo como dar un paseo por el parque de la calle 93 con carrera 13 era una especie de safari de alto riesgo y lo era no sólo por temas de seguridad, que también, sino incluso por elementos de mobiliario urbano. Ha pasado mucho y bueno. A lo largo de ese tiempo he podido conocer a los colombianos, por centrarme en un país, que protagonizaron el cambio, la revolución que llaman algunos, la mutación que ha sufrido esa maravillosa capital. Desde hace más de una década, la capital colombiana se ha transformado en una urbe que ha sido elegida junto a Nueva York o Tokio como ejemplo de la buena arquitectura urbana contemporánea.
Pero no ha sido sólo una cuestión de infraestructuras, que también, o de aumento de la seguridad, por supuesto asunto clave, ni tan solo de crecimiento económico, ha sido algo que he podido vivir desde el interior de la moral latinoamericana y de su pasión por descubrir una vez fueron ellos descubiertos. Y esto no ha sido únicamente un asunto que se circunscriba a Colombia o a los países andinos. Durante estos veinte años he podido conocer y trabajar con varios presidentes y cargos públicos de primer nivel en una decena de países latinoamericanos, establecer proyectos en diversos campos tecnológicos, digitales y estratégicos con empresas e instituciones y, también, establecer amistades, vínculos y relaciones que me permiten, todavía al detalle, analizar la realidad de este gigantesco y heterogéneo escenario. América es compleja y diversa, de hecho me cuesta definirla como un espacio único. Ahora bien, os aseguro que, lejos de esos ámbitos de relación que pueden considerarse de “alto valor”, con lo que me quedo y disfruto es con el concepto global del pueblo latinoamericano en sus múltiples y diversas caras. Puedo decir que una vez “los comprendes“ (eso deben decir ellos de nosotros también) descubres que nada es lo que aparenta y que si existe un pueblo que se lanzó a la conquista de su propio futuro fueron ellos. Nosotros somos un continente en plena huída, ellos ahora son un mundo en expansión desde su propio origen.
Me gusta hablar de una ‘tierra reinventada’, de cómo, al contrario de la definición de algunos, América latina hubiera utilizado todo su organismo vivo tremendamente brillante y lo hubiera reconvertido en algo eficiente sin abandonar su esencia. Y es que no la han abandonado. Latinoamérica no es un lugar donde ir a “sacar” lo que ya no se puede obtener en los puntos de origen. Es un error imaginar que “nos están esperando” para que les enseñemos algo. En gran medida los que tienen mucho que aprender seríamos nosotros. Lo he dicho otras veces pero lo creo firmemente: considerar #latam como un granero, como segunda opción tras la ecatombe occidental o como un lugar de fácil crecimiento debido a que “llevamos ventaja” es un error que cuesta caro. Además, últimamente se suma el hecho de que en Sudamérica el crecimiento está desbocado y hace pensar que todo lo que allí se siembra crece casi sin regar. Ese es otro error tremendo. Limitar una estructura empresarial a un agente comercial tipo “partner” con “amigos, primos o cuñados de un viceministro que conoce a uno de los que firman los contratos del instituto de promoción de las acciones innovadoras” es no tan solo un error, sino sencillamente estúpido. Pensar que todas las reglas comerciales e industriales se saltan a la torera en América latina es absurdo. El funcionamiento es el mismo que en cualquier relación comercial pero con indicativos de implantación que no se pueden desestimar.
Me ha costado dos décadas establecer vínculos serios y fiables. Veinte años cuidando relaciones y generando beneficios en ese destino pues sino concedes no te entregan. Seguirá siendo difícil pero nos basamos en el maravilloso escenario que, ahora sí, permite que si has hecho bien el trabajo y has sido constante, los frutos puedan recogerse. Para ello aposté seriamente en los “centros de innovación” en Centroamérica, los “Bridges” de recursos humanos en el Cono Sur y, desde hace menos años, en la estimulación de la comunidad latina más potente del mundo: Norteamérica.
Ahora mismo estamos centrando los esfuerzos en potenciar nuestras filiales en Chile, Ecuador, Colombia, Panamá, Dominicana, Centroamérica, California y Florida, apostando fuerte por los nuevos equipos de Venezuela, Perú y Brasil y empezando a mover proyectos en México, Uruguay y Argentina. En breve prepararé un informe de cómo estamos desarrollando negocio en Asia Pacífico y la Europa menos “tradicional”.
El llamado Indicador del Clima Económico de América Latina se ubicó en enero en 5,5 puntos, por encima de los 5,2 puntos de octubre pasado y de los 5,0 puntos de enero de 2012, según el sondeo realizado trimestralmente por las dos instituciones entre 138 especialistas de 18 países.
El indicador no era tan elevado desde los 5,6 puntos medidos en julio de 2011, antes de que cayera a 4,4 puntos en octubre de 2011 como consecuencia del agravamiento de la crisis económica internacional.
De acuerdo con el estudio, el clima para los negocios subió entre octubre de 2012 y enero de este año impulsado principalmente por la expectativa de que la situación mejorará, ya que la evaluación sobre la actual coyuntura se deterioró ligeramente.
Mientras que el llamado Indicador de Expectativas, que evalúa las proyecciones de los especialistas para los próximos seis meses, subió desde 5,3 puntos en octubre hasta 6,0 puntos en enero, el Indicador de la Situación Actual, que evalúa la coyuntura, bajó desde 5,1 puntos hasta 4,9 puntos en el mismo período.
Pese a que el clima para los negocios mejoró en general en América Latina, en algunos países la situación se deterioró entre octubre del año pasado y enero de 2013, principalmente en Venezuela, en donde el índice cayó desde 3,4 hasta 1,5 puntos; Ecuador, con una bajada desde 5,0 a 4,0 puntos, y Bolivia, con un retroceso desde 6,0 hasta 5,4 puntos.
En Brasil, la mayor economía regional, el Índice de Clima Económico bajó ligeramente desde 6,1 puntos en octubre hasta 5,9 puntos en enero. Paraguay y Perú compartieron el mes pasado la condición de país mejor evaluado para los negocios, con 7,0 puntos, seguidos por Chile (6,6), Uruguay (6,3), Brasil (5,9), México (5,7), Bolivia (5,4), Colombia (5,3) y Argentina (5,2).
Los peor evaluados en enero eran Venezuela (1,5 puntos) y Ecuador (4,0 puntos).
Internacionalización desde BIZ
El pasado miércoles estuve en el Salón BIZ Barcelona. Participé en la mesa sobre Internacionalización organizada por la gente de First Tuesday con Carlos Blanco y Vicenç Martí. Estuvo muy interesante y pudimos analizar diversos escenarios donde externalizar la producción o las ventas desde un punto de vista digital o de negocio online. Se habló de cómo se está estrechando el mercado nacional y como el cambio de modelo económico y de crecimiento empuja esa necesidad de lanzarse al exterior de modo más urgente e imprescindible. También tuvimos tiempo para detallar en gran medida las enormes diferencias entre los diferentes territorios. En resumen tres campos de análisis que os explico rápidamente y que responden a los más de cien empresas que llevamos internacionalizadas desde nuestra empresa en dos años. El ratio de éxito es muy alto gracias a casi seis años coleccionando y cuidando relaciones, contactos y vínculos que se tarda mucho establecer. Diecisiete oficinas en el mundo que facilitan el proceso y que acompañan al emprendedor o al empresario en ese salto nos han proporcionado conocimiento muy detallado de cómo se puede internacionalizar en medio planeta.
Escenario complejo
Vivimos en la época de las contradicciones, en un nuevo Matrix, como la saga, ahora estaríamos en Matrix Reloaded. Ahora nos dicen que el rescate financiero que hemos tenido que digerir a nivel informativo hace unos días va a permitir que fluya el crédito y reducir la prima de riesgo. Es absolutamente ridículo ver a tertulianos y economistas de última hora asegurarlo. Primero, a más deuda, mayor riesgo de no ser devuelta y por lo tanto mayor presión sobre el deudor o su avalista, el FROB y el Estado en definitiva. Es decir, la prima y su hermana no dejarán de subir por esta razón.En cuanto a lo de fluir el crédito es imposible directamente pues el endurecimiento de las provisiones, que se exigirán con la esperada tercera reforma de De Guindos, es contradictorio a un aumento de la inversión crediticia. Por mucho que ese sea el objetivo de las reformas emprendidas por el Ministerio de Economía es muy complicado aplicarlo al crédito final pues las entidades no están dispuestas a incrementar su riesgo, porque esto supondría que tienen que llevar a cabo mayores dotaciones adicionales para cumplir con las exigencias del sistema y la legalidad imperativa. Lo dicen los interesados.En breve el sistema precisará nuevas reservas para hacer frente a las pérdidas por el volumen de préstamos no inmobiliarios, es decir, para los concedidos a empresas y familias que van diluyéndose poco a poco. Nada indica que el crédito aumentará. Unas provisiones que podrían llegar a superar los 30.000 millones de euros por cierto. No se habla claro, se retuerce la verdad de nuevo como se hizo antes y se niega la evidencia.Por si fuera poco, los avisos desde el gobierno de que la manoseada futura “ley del emprendedor” nacerá amputada de recursos debido al peso final que supondrá el famoso rescate. En definitiva, en lugar de quejarnos, lo mejor es seguir afrontando el reto de lanzarse a la conquista de nuevos territorios.
Necesidades que analizar antes de internacionalizar:
Las necesidades que se identificaron como específicas de la internacionalización digital fueron la Tecnológica a nivel de desarrollo Web. El posicionamiento desde la visión de que es preciso entender los modelos de relación en los países de destino, la logística asumiendo la importancia de establecer algunos elementos de confianza en la doble dirección en la entrega y en la devolución si la hubiera. La necesidad cultural y lingüística que precisa trasladar esencialmente la manera de entender y decir las cosas de un modo determinado y no como creemos que se hace. Y finalmente la capacidad de entender el servicio de atención al cliente como algo cercano y real para el consumidor a partir de las redes sociales puede ser una clave de éxito fundamental.
Las diferentes maneras de internacionalizarse
Se comentó que hay 5 formas también. La filial, que supone la definición de una empresa nueva pero vinculada. El cierre o fracaso de esta supone un doloroso proceso pero no afecta a la matriz. La sucursal que supone otra relación mucho más compleja pero que afecta directamente a la empresa origen pues el fiasco realmente le ataca en la cuenta de resultados pues no se desvincula societariamente. La tercera opción es la búsqueda de partner local y la cuarta la venta via distribuidor local. Para mí la verdadera clave es la que combina todas ellas. Vivimos tiempos de redes y de tecnología, con distancias cada vez más cortas y comunicaciones gratuitas entre continentes. Combinar la gestión en sede local con la del destino exterior, asumiendo la sociedad con un partner y un enlace con distribuidores compartimentando la operativa es sin lugar a dudas lo que nos está dando un mejor resultado a nosotros.
Internacionalizar estratégicamente
La situación es muy grave y seguir pensando en nuevos mercados es imprescindible para los que no quieran que les pille el último toro. Hace un tiempo, y no es puntual si no más habitual de lo deseable, un buen amigo me comentaba que lo había intentado en América y que tuvo que regresar pues no logró su objetivo y que estaba derrotado. Por eso es importante saber cómo internacionalizarse de manera estratégica y con el mayor ratio de éxito con el menor coste posible. La estrategia puede responder a varios criterios:
Se puede hacer ocasionalmente, aunque no lo recomiendo. La empresa exporta de manera esporádica porque ha recibido pedidos del exterior, normalmente sin haberlos buscado. La empresa no ejerce ningún control sobre las variedades de marketing en el país al cual se dirige la venta, únicamente aprueba el precio de venta del importador.Podemos exportar de manera experimental, como mecanismo. Se requiere un agente o “tractor” que te ayude en ese tránsito. La empresa decide iniciar el proceso y busca mercados a los cuales exportar sin depender de los pedidos ocasionales. Realiza acciones de promoción dirigidas a los agentes importadores de los países a los cuales vende o quiere vender, pero no controla el precio de venta final, sino el precio de costo para el distribuidor.La internacionalización regular, a la que nos dedicamos, es la que permite que alguien te impulse y genere ecosistemas de relación para que a la larga tú mismo puedas hacerlo. Se buscan lobbys cercanos y se estructuran agendas de mucho valor, que nada tienen que ver con las que un organismo gubernamental te suele montar y que te cuestan dinero y tiempo y cuyos efectos suelen ser ridículos. Si la empresa empieza a realizar exportaciones, o se instala por que es de servicios, a una base estable de clientes y se dedica a reservar una parte de su capacidad de producción para la exportación, este es el que debe afianzarse. En esta etapa, las empresas suelen crear un departamento de exportación con una persona a cargo de esta actividad que suele ser mi punto de enlace. Controlan además de las variables de marketing, el diseño externo del producto y puede colaborar en la fijación de precios y en las acciones de promoción de la venta al detalle.Cuando una empresa pequeña se afianza en el exterior pasa a ser una multinacional con todo lo que eso comporta. Son pequeñas multinacionales. La empresa debe comprometer mayores recursos, asumiendo niveles de riesgo muy superiores a los de etapas anteriores obviamente, pero con un mercado también mucho más diverso y repleto de oportunidades.
Ejemplos de internacionalización online
Hace un par de años un amigo me llamó para pedirme ayuda. Su negocio estaba en quiebra. Tenía un desguace de vehículos y, contrariamente a lo previsto, la crisis no le estaba beneficiando. Sus ventas habían caído en picado. Su modelo de negocio dependía de que los automóviles que debía descuartizar no eran suficientes para ofrecer un recurso atractivo a los escasos compradores que se acercaban a su superficie en las afueras de una pequeña población al norte de Barcelona.
Me instalé en su empresa durante dos semanas. Examiné los procesos y hablé con los implicados. Al poco le ofrecí una solución que resultó ser muy beneficiosa. Lo primero que le comenté era que su sistema de desguazar los autos debía estar sintetizado. Para ello compré una base de datos que aportaba la mayoría de modelos y marcas del mercado. El sencillo software que instalamos en una PDA permitía que el desmontaje se codificara y concediera una ubicación ordenada de todas la piezas. Asi se lograba una eficaz distribución y una eficiente inventario a tiempo real. Ese listado se incorporaba a una base de datos en las oficinas de la empresa. Hasta ese punto nada nuevo, nada especial. No disponíamos de ninguna característica que diferenciara ese negocio de otros que ya hacían algo parecido. La singularidad, el diferencial, el valor añadido se logró en el preciso instante que esa base de datos, esa eficiente máquina de ordenar las existencias, se digitalizó en la red. A partir de ese instante las ventas online empezaron a producirse. En menos de un año la facturación aumentó a niveles impensables durante la crisis. A pesar de todo esto, no nos paramos. Ramón, que así se llama el hombre que decidió no detenerse ante las dificultades, preguntó si era factible vender piezas de coches clásicos por Internet. Fue posible. Esa es ahora una de sus principales ofertas. Se ha convertido en un hub de captación para los coleccionistas y un conector para los exclusivos clientes que se esconden tras el apasionado mundo de los coches de autor. Ahora sus ventas se miden por países y no por comarcas.
Escenarios para internacionalizar
Finalmente, la mayor parte del tiempo lo que hicimos fue analizar países y zonas concretas. Algo que ya se ha tratado en este blog alguna vez. Aunque estuvimos analizando muchos destinos quedaron claro cuatro elementos:
No es correcto centrar una operativa por cercanías lingüísticas, es posible que tengamos más en común con un mercado serbio que con uno colombiano aunque al primero no lo entendemos bien por aspectos lingüísticos.No es una buena decisión iniciar la internacionalización porque conocemos a alguien en destino que dice que tiene muy buenos contactos. Todos dicen tenerlos pero no siempre son operativos o los que necesitamos.Es interesante la prueba piloto en países pequeños en un entorno donde nos interese atacar a medio plazo en destinos más complejos y grandesNo es una buena idea afianzar el modelo de distribución exterior en varios países cercanos entre sí. Es preferible elegir un grupo de países por otros motivos, incluso estando lejos los unos de los otros, hay elementos que los hacen logísticamente idóneos y no por aspectos geográficos y si por temas de divisas, legislación, aduanas, fiscalización, aspectos sociales.Atender a los socios en destino en base a la confianza es clave. Para ello muy recomendable sentirse acompañado y dirigido por empresas, que como la que nosotros gestionamos, te permite minimizar los riesgos de gastar dinero en procesos inútiles o ineficientes.Aprovechar situaciones de crecimiento tecnológico pendiente. Por ejemplo Italia es un caso paradigmático. Berlusconi no tenía intereses comerciales en la red digital ni en la banda ancha móvil por lo que nunca potenció Internet. Ahora esos dos años de retraso respecto a otros países como el nuestro permite afianzar posiciones rápidamente y entrar en canales de captación de cuota de mercado de un modo mucho más interesante.
En definitiva internacionalizar, en cualquier aspecto, es algo complejo sofisticado pero que nos da una nueva vía para sobre volar la estrechez inminente.
Venture Days & Nights
El Instituto de Empresa llevará por primera vez su jornada de VentureDay a Colombia, esta ocasión con sede en su capital Bogotá, el próximo 28 de Junio de 2012. El evento consiste en el encuentro entre business angels o inversores y emprendedores, y cuenta ya con un número largo de ediciones en España y otros países, y significa una oportunidad para que muchos estudiantes de IE presenten sus business plan y negocios ante inversores Angel. Por esas fechas estaré por allí. El pasado año IE llevó la iniciativa a Shanghai, China, y este año tendrá luego de la celebración en Colombia se organizará también una jornada en México.
En paralelo a esa iniciativa, la firma financiera estadounidense Riverwood acaba de anunciar una convocatoria a startups latinoamericanas enfocadas a la tecnología móvil y al cloud services. Todo el mundo comenta en algunos puntos de Latinoamérica la cada vez más es evidente la intención de parte de jugadores de alto perfil por estimular a los emprendedores e innovadores de la región a que se lancen con nuevas propuestas de negocios. Con todo, levantar financiación, incluso en esos países, sigue siendo uno de los retos mayores que enfrentan los emprendedores, sobre todo si son primerizos. A continuación os dejo con las tres palabras mágicas que pueden conjurar el éxito en esa fase inicial de emprender un negocio según la publicación América Economía
1° Pasión
Un emprendimiento es un riesgo para el emprendedor, hay que estar dispuesto a ver la idea fracasar. Pero invertir en un proyecto es más arriesgado aún, porque el inversionista no es quien tiene al final la sartén por el mango, y no va a poder estar presente para controlar cada fase de desarrollo del emprendimiento. Por eso no es sorpresa que muchos inversionistas y business angels coincidan en que “la pasión” que muestra el emprendedor es uno de los aspectos que más los convence. Casi nunca saben explicar por qué, pero de alguna manera se figuran que un emprendedor apasionado estará dispuesto a poner todo en su proyecto para sacarlo adelante. Y si ese fuego falta, si la misma persona que pide el financiamiento no parece convencida, por qué arriesgarse entonces por ella. Paul O’Toole, director ejecutivo de UDD Ventures, lo expresa con la metáfora del “soldado dispuesto a ir a la guerra. Cuando se tiene pasión por un proyecto los inversionistas estiman que no subirá la bandera blanca cuando haya un problema, sino que persistirá”. Paris L´Etraz, Director del Venture Lab de la española IE Business School, coincide con O’Toole al decir que “los business angels suelen valorar la pasión y el compromiso por la idea que demuestra el equipo”.
2° Equipo
Excepto alguna que otra rara avis, llevar adelante un negocio es obra de un equipo, no de un humano solo. Por tanto, formar un equipo con sabiduría es una carta de triunfo. Esto significa que las competencias necesarias estén presentes, optimizadas y repartidas entre los miembros, no repetidas. Además, deben ser capaces de mostrarse unidos y cohesionados, dispuestos por igual a hacer el mismo esfuerzo por salir adelante. Esto es también un atractivo para el inversionista. “Un proyecto con buen equipo genera ventas”, continúa O’Toole, “se requiere un grupo de personas multidisciplinario para no tener que buscar profesionales externos. Es básico contar con un programador y alguien con habilidades más comerciales. La capacidad de venta es importante porque como cualquier negocio, debe comercializarse, y si en el quipo son todos muy opacos y ténicos es posible que no tenga mucho futuro el emprendimiento. Es bueno también que existan varios puntos de vista”. Alejandro Russo, creador y comercializador de Kloof, aplicación para iPhone, y fundador de Soy Gourmet, guía de restaurantes para iPhone, confirma esta opinión y ejemplifica con su propia experiencia, “somos sólo cinco personas, cada uno tiene un rol específico y sabe qué hacer”. Mientras, Jorge A. Rodríguez, fundador de Continuum, agencia de desarrollo de software, quien recientemente levantó US$ 100 mil para su nueva startup Rhyboo, llama la atención sobre otro punto interesante, las relaciones interpersonales que se establecen entre equipo e inversionista como un elemento previo, y muy influyente, en la decisión final de aportar capital. “No he visto ningún inversionista o ángel que se decida desde la primera reunión, a no ser que seas Mark Zuckerberg o Jack Dorsey. Pero luego del tercer encuentro y el decimoquinto mail se ha establecido una relación de confianza que va más allá del proyecto. Creo que finalmente el 60% o 70% de la inversión es en el equipo o los founders”.
3° Calle
Las clásicas figuras de financiación son los bancos. Pero más de un gran negocio se ha levantado sin la necesidad de pedirle créditos a estas grandes instituciones. O de lo contrario, a veces son tantos los requerimientos que los bancos interponen entre un préstamo y el emprendedor, tales como la mayoría de edad, solvencia, posibilidad de devolución, que de plano hay que descartarlos desde el inicio. Cuando esto sucede, el emprendedor aún tiene puertas que tocar y para eso debe dejar los zapatos en la calle. En algunos casos son programas gubernamentales, en otras los amigos y familia. Pero nunca deben perderse de vista las instancias que permiten la interacción entre business angels y emprendedores. Otros emprendedores que ya han salido adelante, y por eso mismo pueden mostrar una sensibilidad especial con uno más joven, puede ser una fuente de apoyo invaluable. Vale además estar pendiente de concursos y premios que eventualmente aparecen, y quién sabe. Sin embargo, lo más importante es no quedarse esperando a que el dinero llueva o aparezca envuelto en papel de regalo en la puerta de casa. “Hay que salir a la calle a ‘buscar capital‘, el dinero está afuera. Nadie va a llegar de visita a la oficina a brindarlo”, comenta Rodríguez.
Tengo la impresión que hemos dependido demasiado tiempo de eso de “levantar capital” y nos hemos olvidado de otros modos de poner en marcha negocios. Hace unos días hablábamos de los emprendedores freemium. Dejando de lado el acrónimo y el elemento metafórico que buscaba si es cierto que algo está cambiando en el escenario de las inversiones en start-ups. De hecho hay una tendencia que prioriza la búsqueda de capital inteligente antes que la tan ansiada liquidez. En ese sentido hace unos días cayó en mis manos este artículo que lo refleja bien. La computación en la nube, los dispositivos móviles, las redes sociales y otras tecnologías de acceso rápido a Internet, están produciendo oleadas de nuevas start-ups, pero para muchas de estas jóvenes empresas, el capital riesgo es la respuesta equivocada, por lo menos al principio. Os traduzco lo que considero más relevante.
Así lo expresó un grupo de inversores y empresarios que hablaron de Microsoft en Silicon Valley en un evento patrocinado por el Club de Churchill. Con Amazon Web Services y una mirada de otras tecnologías libres o de bajo costo, la creación de empresas es más barato que nunca, por ejemplo. Como inversor, Draper Fisher Jurvetson socio de Heidi Roizen dijo que trata de convencer a la gente de lo bueno del capital riesgo, pero como profesor en Stanford trata de explicar otros puntos de vista.
Dice que “todos los estudiantes de mis clases quieren recaudar dinero y hacerlo público y les digo: ¿Estás construyendo un restaurante o un McDonald?”. Añade que “si has creado un sitio web alrededor de lo que te apasiona y ganas 25.000 US$ al mes puede ser un gran logro y un estilo de vida, pero si tras lograr 5 MM US$ de capital riesgo prepárate para darle un exit de diez veces su dinero”.
Internet permite a los empresarios innovar de formas que no son técnicas por ejemplo. (…) Los emprendedores que quieren empezar con empresas de base tecnológica deben buscar la mayor cantidad de servicios gratuitos que puedan. MacAskill, cofundador y director ejecutivo de SmugMug, un sitio web de fotos de 10 años de edad, dijo que, en su caso, el intercambio para los fotógrafos profesionales debía ser rentable por si mismo y no depender de la entrada del capital de riesgo.
En estos momentos, a medida que con mi equipo vamos aprendiendo de la experiencia, estoy convencido que a veces los proyectos son más intensos si apoyamos el modelo con algo de desarrollo tecnológico asociado, que con dinero para localizar esos ingenieros. Si somos capaces de equilibrar esas entradas de capital en el momento exacto estaremos ante succeful start-ups.
Comparativa emprendedora
Hoy me preguntaban en una de las televisiones en castellano que se emiten en USA en que se diferenciaba un emprendedor europeo de un norteamericano. La verad es que se me ocurrió hablar en términos generales no tanto de como se emprende sino de como se percibe la realidad. Les hablé del soldado invencible. Al volver al hotel pensé en rebuscar mis definiciones de como se emprende en medio mundo. Hay lugares que desarrollan modelos de crecimiento vinculados a la emprendeduría tecnológica y otros que deconstruyen esos escenarios. Veamos a cual pertenecemos con el viaje que hoy os propongo y que tiene su origen en escritos ya publiqué en otro momento pero que siguen siendo actuales y, espero, útiles.
Hace unos años, durante una entrega de premios en México, compartí mesa con un emprendedor. Sin decir su nombre es posible que muchos sepan quien es. Se trataba de alguien que en un momento determinado decidió invertir todo su capital disponible a una sola carta. Nacido en San Carlos, California, tenía el gen del emprendedor en su sangre. Rompiendo los cánones establecidos se compró un hotel abandonado en una de las zonas más peligrosas de San Francisco. En menos de una década disponía de una cadena de medio centenar de hoteles, tres mil empleados, restaurantes, zonas de ocio y una facturación de 200 millones de euros anual.
Se llama Chip Conley, conocido por un libro que habla de las normas que considera imprescindibles para ser emprendedor. En su libro expone que el éxito empresarial se esconde la mayoría de las veces tras la acción contraria a la tradicional, a la que se espera de ti o la que el Estado ha establecido como lógica. Habla de rebeldía y de modificación de normas, de afrontar la cultura norteamericana con valor y espíritu de las generaciones que se enfrentan a sus retos diarios sin contar con la administración. Este tipo compró un motel de encuentros para parejas infieles y lo convirtió en el principio de su imperio. ¿Cómo se hace eso? ¿Qué despierta esa necesidad? Hay países que están especialmente diseñados para ello o bien, están construidos bajo esa dinámica. Los Estados Unidos son uno de ellos.
Cuando un emprendedor decide disfrutar la vida a partir de crear una oportunidad para emprender se dice que es norteamericano. Suelen tener esa concepción de la empresa y del proyecto. Hay de todo, claro está, conozco casos muy cercanos de mujeres que abandonaron su país y se vinieron a España precisamente para no vivir bajo esa presión. En los Estados Unidos la lección es el fracaso. Nunca se sale derrotado de una batalla aunque se pierda, es una nueva lección, una herida que cicatriza y que enseña. Todo lo contrario que aquí. Los americanos que emprenden un nuevo proyecto buscan diferentes caminos pero todos responden a un tronco común: crear clientes fanáticos, comprometerse con la calidad y el servicio, incorporar al rendimiento a los colaboradores y el riesgo como gasolina.
Cuando hablamos de Estados Unidos debemos casi incluir el Reino Unido. El modelo de emprendeduría se parece excepto en lo tecnológico, pero si en la variable existencial de sus protagonistas. Mientras que en países más mediterráneos como el nuestro hay cierta tendencia a que el fracaso determine para siempre la aventura empresarial, en esos otros pasa lo contrario. Aquí el error estigmatiza, allí proporciona valor añadido.
En Estados Unidos o el Reino Unido los créditos a emprendedores son mucho más sencillos de obtener, no las ayudas, sino la implicación privada en esos asuntos. Si los solicitantes han tenido algún fracaso, éste se examina y se concluye, independientemente del hecho mismo de haber cerrado un negocio, si es factible el nuevo proyecto. Se valora la experiencia de alguien que, no habiendo triunfado en un intento anterior, vuelve a probar con otra idea.
Un detalle curioso: si te suscribes a barackobama.com recibirás un montón de mails sobre las actividades del Presidente americano. Si observas el asunto, verás que cuando se refieren a cuestiones económicas o de negocios, el asunto es “President Obama means business”, lo que se puede traducir de dos formas: “El presidente Obama habla en serio” o literalmente “El presidente Obama significa negocio”. Si en España el asunto del correo en cuestión fuera parecido, ¿qué creen que pondría? ¿”negocio” o “en serio”?
En el Reino Unido, como en Estados Unidos y Japón, lo que caracteriza su economía es el libre mercado en todas sus consecuencias. En ese trasfondo conceptual el gobierno británico, a través de su Secretaria de Comercio e Inversión creó en 2003 un interesante programa, el GEP: Programa Global de Emprendimiento (GLOBAL ENTREPRENEUR PROGRAMME). Sería un programa más, entre tantos, que crean a nivel gubernamental: ayudas, herramientas, contactos y red, pero tiene una característica fundamental, que sabe aprovechar el legado colonial británico.
El GEP fue creado en el año 2003 y su finalidad es la creación de empresas sostenibles modelo star-up que utilicen al Reino Unido como base estratégica para su expansión internacional. Las ayudas también se focalizan para el desarrollo de talentos emprendedores extranjeros en el Reino Unido. La India es el primer país en donde el GEP se ha lanzado, ya que tenían presente la gran cantidad de talentos emprendedores en ese país. La gracia de esto, es que ayudan al emprendedor indio a acercarse paulatinamente a las redes de inversionistas en el Reino Unido y a construir un negocio global.
Planean encontrar a gente con potenciales ideas excepcionales, que ganen su confianza y después les proporcionaran la orientación en todos los aspectos para la creación de su negocio en el Reino Unido sea un éxito rotundo y utilicen a Reino Unido como una plataforma de lanzamiento mundial. Facilitar la entrada de emprendedores con el GEP, permitirá estipular un marco de referencia para el ingreso de los innovadores extranjeros a Reino Unido que es acompañado de un programa migratorio altamente experto, de hecho son dos programas con garantías para la inmigración.
Además, el asesoramiento también será proporcionado en factores personales como la ubicación de sus nuevos hogares, escuelas para los niños etc. Es decir, que se selecciona a emprendedores altamente cualificados, que puedan establecerse en el R.U y que a más puedan mantenerse sin ayuda de fondos públicos y que se puedan financiar ellos mismos, eso si, se les pone en contacto con un potente red de business angels.
Curiosamente, la Unión Europea está atacando sus programas de incentivación emprendedora a partir de los programas Erasmus. Tal vez sea el mecanismo idóneo para levantar del taburete ociosos a miles de jóvenes que se toman el final del ciclo educativo como un fin de fiesta lisérgico en lugar de un espacio de activación personal y profesional.
En el 2009 la UE a través de un programa ERASMUS, inició un programa Erasmus de intercambio para emprendedores, basado, en parte en el modelo business angels, en el que el estudiante realiza un stage de 1 a 6 meses con un empresario “acogedor”. Se trata de poner en contacto a nuevos emprendedores con emprendedores experimentados. El emparejamiento de emprendedores con empresarios del país receptor se lleva a cabo con la ayuda de 100 organizaciones intermediarias especializadas en servicios de apoyo a la empresa (Cámaras de Comercio, Incubadoras de empresas, Centros de Start-Up, etc.) repartidas por toda la UE.
En gran medida, si algo caracteriza el escenario de occidente es que el fracaso es un incentivo. Intentar es consustancial con el error y el error con el intento. Si no se lanza uno a buscar sus sueños, aunque duela, nunca se alcanzarán. Hay países que premian esa dedicación, ese arriesgado tránsito entre lo más difícil.
En España es todo lo contrario. Si lo intentas y va mal, se acabó. Cuesta mucho resarcirse. Se logra con mucho aval externo, ocultando los fracasos y esperando que los éxitos venideros permitan entrar en un ciclo de confianza crediticia. Terrible puesto que se pierde el gigantesco valor que proporcionaría en una sociedad en crisis de emprendeduría que muchos de los que ahora ya tienen experiencia en montar negocios, y en sus peligros y dificultades, volvieran a intentarlo. No lo hace y perdemos ese gran activo.
Otro modelo completamente distinto es el francés. La crisis alienta el espíritu emprendedor, eso está claro. Para ello es necesario en algunos países que la Administración allane el camino simplificando papeleo y costes para que los ciudadanos puedan convertirse en sus propios empresarios.
En Francia, la combinación de ambos factores ha conllevado un auténtico boom de emprendedores, una de las claves de que la recesión se haya visto más amortiguada al otro lado de los Pirineos. Está claro que los emprendedores pueden ayudar a una salida de la crisis de tipo inesperado y valorable.
Desde 2009 el Gobierno francés no para de lanzar iniciativas para promover el emprendimiento, de todo tipo y con verdadero alcance sobre la sociedad. Un país que aparentemente vive adormecido por la ayuda pública, sale a la calle en cinco minutos si algo no les parece bien. Sus derechos sociales alcanzados durante mucho tiempo de lucha se han convertido en aliados más que en problemas. Ahora están asumiendo que la crisis reduce algunos de esos modelos de uso y cobertura pero, al contrario de lo esperado, está emergiendo una generación de emprendedores de todo tipo y condición que aprovechan un modelo subsidiario como motor de cambio. Parece una extraña incoherencia pero no lo es. He vivido en Francia y puedo asegurar que las incoherencias en Francia son de lo más coherentes.
Los paquetes de medidas adoptadas sobre la emprendeduría en Francia giran alrededor de una nueva ley, según la cual, los emprendedores franceses podrán tener su patrimonio a salvo en caso de que fracase su empresa y si el cierre no esté motivado por una negligencia en la gestión. Para ello, se pueden inscribir en un Registro específico los bienes afectos a la actividad empresarial que, en caso de quiebra, serán con los que responderán a las deudas contraídas. Esta nueva ley equiparará el nivel de responsabilidad del emprendedor individual al que disfrutan los emprendedores que operan a través de una sociedad mercantil. La ley entrará en vigor en enero del 2011.
Como esta hay otras. Diferentes acciones dirigidas desde la decisión política que va más allá del subsidio o del estímulo puramente líquido. Ataca al problema, al meollo. Para alguien que arriesga todo su patrimonio en una apuesta empresarial como hace un emprendedor, cualquier apoyo encaminado a salvaguardar su histórico económico es un gran soporte. En 2009 los franceses crearon más de medio millón de empresas frente a las poco más de 300.000 puestas en marcha en el 2008.
Algo que es habitual comparar entre España y el resto del mundo es el método de puesta legal de cualquier proyecto empresarial. Mientras que en nuestro país eso se puede hacer eterno, el trámite administrativo de creación de empresas para emprendedores en Francia se ha simplificado a un solo formulario, que se puede rellenar por Internet en tres minutos. Hay un pago simplificado de las cotizaciones sociales y del IRPF, lo que ha supuesto un avance revolucionario en la economía privada francesa.
En el país galo, el comercio y los servicios son los sectores que más han aprovechado este cambio legal, aunque se ha experimentado una importante progresión en la educación, el arte y los espectáculos, los servicios de atención a la persona, la información y la comunicación. La Agencia para la Creación de Empresas de Francia detectó un crecimiento superior al 135% en estas áreas. Curiosamente todo lo contrario a lo que pasa en España que está estrechando a muy pocos nichos esa apuesta por la empresa propia. Mientras que otros países diversifican las pequeñas acciones privadas, aquí más de la mitad de los proyectos que se abrieron en los últimos seis meses tienen que ver con los servicios Web o la prestación digital. Aunque a primera vista parece que eso es un síntoma de la modernización empresarial y de sector en España, bien puede ser también un mal síntoma si no somos capaces de estructurar negocio y emprendeduría en todo el arco productivo.
Mientras que en Francia aumentan los nuevos negocios por encima de la destrucción de empresas, en España sucede todo lo contrario. En lo que llevamos de año, en este país más de diez mil autónomos desisten en sus proyectos cada mes. Esto pasa por diversas cosas, pero sobretodo por un clima social y empresarial vinculado a una moral plana y anestesiada de nuestra sociedad. Eso lo veremos en el próximo capítulo.
Otros países que afrontan de manera distinta a nosotros el modelo de emprendeduría y acción social en todo su conjunto son Alemania y Japón. Obviamente no voy a analizar país por país, sino más bien modelos nacionales que puedan ser canon o patrón de otros.
Si atendemos al modelo alemán veremos que en lo administrativo los esfuerzos han ido encaminados a reducir la fricción a la hora de montar un negocio. Allí, por ley, una empresa debe estar disponible en dos días. Eso ayuda a que grupos de emprendedores sin grandes recursos y mucha prisa puedan adoptar sus modelos de negocio con mucha más facilidad. Sin embargo el cambio en Alemania con respecto a otros entornos es que ese proceso está liderado por un cóctel informal de capital riesgo, proyectos audaces y charlas de bar. Las conversaciones ahora en algunos centros de desarrollo tecnológico de las principales ciudades alemanas gira en torno al número de usuarios únicos y de audiencias digitales. En España es cierto que hay una efervescencia en ese sentido pero parece responder más a una salida calculada a la imposibilidad de montar negocios con infraestructura compleja y que la digitalización de todo permite reducir costos e implementar el teletrabajo como sistema inicial. Luego ya se verá. En Alemania nada es improvisado. La burbuja puntocom también se cebó allí hace una década y lo saben bien.
Al contrario de lo que pasa por estos lares, los patrocinios son mucho más heterogéneos. Son muchas las empresas que están dispuestas a apoyar proyectos y a emprendedores en sus eventos o en sus productos más radicales. Aquí eso sólo pueden llevarlo a cabo las grandes empresas de siempre, coaccionando el desarrollo de nuevas iniciativas a las del gusto del patrocinador, y este siempre acaba siendo el mismo. El resultado: poca variedad emprendedora.
Leí a Rodolfo Carpintier en cierta ocasión describir ese modelo de apoyo a la emprendeduría digital. Se trataba de que un grupo de emprendedores alemanes que se habían hecho de oro gracias a Internet se organizaran en Berlín fundamentalmente para apoyar como Business Angels a otros emprendedores germanos. El resultado fue impresionante y algunos de esos apoyos se han convertido en verdaderas multinacionales que operan en medio mundo.
Se debe decir que, guardando la diferencia, precisamente están intentando lo mismo en España. Hay decenas de encuentros, citas, reuniones, clusters, que dinamizan los mecanismos que permitirán ayudar a emprendedores noveles a triunfar. Todavía la diferencia entre países, y eso lo conozco bien, es cuando el apoyo limita el territorio. Me explico, mientras que el inversor o angel empieza a examinar tu proyecto y se toma unos días o semanas para analizar la viabilidad de entrar en tu empresa, en España te impone muchas veces “focalizar en este país y luego ya veremos si salimos fuera”, en Alemania eso es completamente al revés. La filosofía y el valor emprendedor de los alemanes va directamente ligado a su voluntad por exportar. Ser la primera potencia exportadora del mundo es algo que se lleva en el modelo estructural y el emprendedor lo sabe, por ello afronta sus proyectos en ese sentido.
En términos generales, podemos decir que hay países que la emprendeduría es un estado de ánimo. Algo que va en paralelo a la manera de afrontar la vida. El caso es que no siempre ese “estado” es el que esperamos o creemos. Hay mucho tópico que viajando se curan. En Estados Unidos es evidente que lideran lo de ponerse manos a la obra, en Alemania su voluntad de exportar, en Francia la de salir de la crisis y en otros países el enfrentamiento al cloroformo social se interpreta de muchos modos.
En otros países distantes como Japón, el culto del trabajo es muy distinto. La competitividad se “educa” ya en la escuela, así como a ser un buen trabajador, fiel, y como no a ser un buen empresario. En Japón, enseñan a sus estudiantes a ser empresarios, proporcionándoles implícitamente las habilidades para ser buenos empleados, situación que no resulta a la inversa, ya que un buen empresario, trabajará en una empresa con mentalidad de negocio, aportando acciones creativas, emprendedoras, de cambio y buscando aprender para iniciar su propio negocio, en cambio un empleado, trabajará siempre sujeto a las órdenes de sus superiores, dedicándose a hacer lo que le manden. No tiene desarrollada una mentalidad de empresario. En las escuelas japonesas se enseñan conceptos como el “ser buena persona”, la honestidad, la puntualidad y la disciplina…todo regido por un principio fundamental: el respeto (los padres, a los mayores, a les jefes…)
Japón es un país muy pequeño, pero tiene 124 millones de habitantes. Ahí tuvieron su origen los diez bancos más grandes del mundo, cuentan con el índice educativo y de longevidad más alto del mundo, tiene los índices de criminalidad más bajos del mundo y su Producto Interno Bruto equivale al de Alemania, Francia e Inglaterra juntos. La mentalidad del japonés es “Ganar-Ganar”: Si gana la empresa con mi trabajo, ganaré yo en sueldo.
No es una sociedad ideal, ni mucho menos. Sin datos reales, se estima que puede haber unos 100.000 hikikomoris. Son adolescentes y adultos jóvenes que se ven abrumados por la sociedad japonesa y se sienten incapaces de cumplir los roles sociales que se esperan de ellos, reaccionando con un aislamiento social. Los hikikomori a menudo rehúsan abandonar la casa de sus padres y puede que se encierren en una habitación durante meses o incluso años. La mayoría de ellos son varones, y muchos son también primogénitos. Este tipo de problemas se centran (aunque bien, no son exclusivos) en las clases media-alta y alta, donde el joven posee cuarto propio, lo cual es considerado un lujo en Japón. La palabra japonesa hikikomori significa aislamiento en español. Mientras que algunas personas sienten presión por parte del mundo exterior, y padecen agorafobia, un hikikomori reacciona con un completo aislamiento social para evitar toda la presión exterior. Podríamos decir que están larvando una sociedad muerta, una generación perdida como la que nosotros estamos ya digiriendo.
Pero hablar de emprender en el mundo en un capítulo resumido es como querer novelar la historia de la humanidad. Obviamente es un tema en si mismo, pero como lo que busco es comparar hechos anecdóticos que muestran el crítico estado en el que se encuentra nuestra sociedad y sus valores de arranque vital, con algunas pinceladas nos bastará.
Hablemos de África. No puedo dejar de referirme a los zapateros del principio de este libro. El continente negro es muy complejo en su composición obviamente y eso lo hace tremendamente atractivo. Sus gentes son muy distintas en cada una de las zonas que artificialmente dividieron los europeos hace ya algún tiempo. Hablar de países es difícil, puesto que muchos de ellos no responden a una verdadera frontera étnica, social o cultural. Tampoco en lo empresarial.
Lo que me fascina de este continente desconocido es ver como se ponen en marcha. Observar y analizar el método de emprendeduría que están gestando los africanos permite entender muchos de sus condicionantes. Muchos de los elementos que aquí nos son distantes podrían ser claves para el éxito en Europa por ejemplo.
Todo tipo de industrias cubren el arco empresarial africano. La perspectiva de que África es el escenario básico de la caridad y la ayuda internacional es errónea. Si observamos con detenimiento descubrimos un motor social potente que cree en si mismo. Hay de todo, pero África está despertando mientras una gran parte del mundo se va durmiendo. Las oportunidades de negocio recorren de punta a punta el continente. Cruzando selvas y desiertos, los africanos han afrontado con decisión el siglo XXI. En Zimbawe, en Ruanda, en el Congo y en el sur del Sudán están floreciendo nuevos negocios a la sombra de la violencia y el desgaste de las dictaduras siniestras que les han atenazado durante tanto tiempo. Si esos países tan dañados por su historia reciente están poniendo las bases para emprender su propio destino económico que no estará pasando en el resto de estados que ocultan una gran oportunidad. Sin llegar al detalle, cabe saber que en Africa todo es difícil y esa es su oportunidad. Superar las barreras se ha convertido en el mayor motor de superación de una sociedad harta de vivir de la beneficencia. Que distinto punto de vista de lo que vivimos en otros puntos del planeta incluido nuestro país, donde las dificultades se han convertido en el verdadero motor de solicitud de ayudas asistenciales y de subsidios familiares.
Si en África emprender es un gesto de supervivencia donde los llamados “cheetah” (guepardos) viven en un mundo de hipopótamos y logran crecer, en otros países del tercer mundo pasa parecido. En países como Kenia, al igual que en Bolivia, la economía de mercado no es ni capitalista ni socialista, lo que las asemeja es que fusionan a partir de las tradiciones tribales keniata o bolivarianas respectivamente.
La emprendeduría latinoamericana es tan diversa como estimulante. En países como Colombia, Ecuador, Perú, Paraguay y en general el conjunto de todos ellos poseen un principio activo común: la falta de prestaciones sociales suficientes dinamiza la economía de guerrilla, esa en la que se mueven estos microemprendedores todos los días. No hay ayudas a la puesta en marcha de negocios, no hay gestión dirigida y subvencionada pero el crecimiento de todos ellos, a la sombra de la caída de los imperios occidentales, los llamados núcleos emergentes americanos como Chile o Brasil principalmente están girando hacia todo un nuevo escenario que acepta el capital externo como soporte a la oportunidad de emprender.
Panamá, Costa Rica y toda Centroamérica responde también a ese principio de aprovechar cualquier resquicio que proporcione una oportunidad. La necesidad impide que nadie se duerma en el sofá social. Esa es la gran diferencia y la oportunidad que nos ofrecen desde allí.
En el Cono Sur y en todo el sur de América incluyendo incluso México pero algo de reticencias, la exposición a los debates económicos mundiales es escasa para los que quieren poner en marcha proyectos. Es un placer tratar con aquellos que todo el día están arrancando proyectos por modestos que sean. Otra cosa es querer emprender con ellos. La verdad es que implementar negocio en esta parte del mundo tiene grandes dificultades y aunque también supone retos en lo personal y en lo profesional, lo más destacable es el conocimiento de un nuevo escenario para desarrollar proyectos.
La oportunidad son sus desequilibrios, unos desequilibrios que irán desapareciendo y que se convertirán en el patrón de cambio económico. Ahora son ellos los que empujan y los que piden estímulos externos. Mientras medio mundo se movía en cifras negativas, Chile, por ejemplo, creció al 7,1% en mayo de 2010. Lo bueno de viajar es que descubres que aprendes. Es sencillo. Muchos europeos o norteamericanos viajan por el planeta con la voluntad de internacionalizar sus proyectos, de crear en esos países, pero al final resultará que en Latinoamérica especialmente, donde fuimos algunos a desarrollar proyectos de emprendeduría digital y de la Nueva Economía, notando y creyendo que exportaríamos know how, acabaremos aprendiendo más que enseñando. Cuando nuestra sociedad más inmediata se levante del sofá y descubra que tiene que afrontar retos en el exterior deberá saber que, a otros países aparentemente menos desarrollados que nosotros no se va a enseñar, se va a aprender, y en el mejor de los casos a comprender.
Está claro que podemos mostrar usos y estrategias que no se conocen en esos países para poner en marcha negocios, pero las dosis de realismo y de uso práctico de todo ello suponen toneladas de modestia que los europeos necesitamos digerir si queremos hacer negocio en América del Sur.
Como catalán he visto una sociedad, la catalana, dejar de ser líder y referente en su entorno inmediato, la he visto perder la aureola de ejemplo en temas de emprendeduría y de capacidad económica. He podido sufrir la reducción a la mínima expresión la hipotética superioridad argumental que se le presuponía a una tierra de oportunidad y de empuje. Conozco bien, por tanto, el tono que tiene la decadencia. Como catalán que ha vivido la destrucción de una clase emprendedora capaz de afrontar retos que la administración era imposible que pusiera en marcha. El Liceu, la autopista del Mediterráneo y tantos proyectos que en otras décadas tuvo que partir del impulso y el presupuesto privado. Ahora cuando la sociedad catalana se reúne para afrontar un proyecto nuevo, lo primero que se cuestiona es “cuanto nos aportará la administración”.
El GEM es una organización académica, no gubernamental, que elabora varios informes anuales sobre la actividad emprendedora. Esta organización se inició en 1999 como un partnership entre la London Business School y el Babson College. Ahora se extiende por 56 países, con la colaboración de escuelas de negocios y universidades de todo el mundo. A través del Global Entrepreneurship Monitor descubrimos que España es la sociedad número 40 más emprendedora de una selección de 66. Por delante hay países del centro y sur de América, algún africano y varios asiáticos. De Europa tamién hay que nos supera. Que le vamos a hacer. Es un síntoma de un desánimo estructural, de una patología social y de un clima empresarial.
Cronología de una catarsis
Sigo por tierras lejanas. Cada vez son más los clientes y amigos que piden que les ayudemos a salir del complicado escenario español y buscar nuevos horizontes para sus negocios. Aunque la mayoría lo hacen empujados por la necesidad y no tanto por una estrategia estructural si es cierto que es una buena opción si se hace de manera bien organizada y consultada. El número de emprendedores y empresarios que deciden ponerse en marcha en territorios distantes aumenta desde hace años y a ritmo cada vez más acelerado. Mucho ha llovido desde que aquí habláramos sobre quiebras bancarias, cierres de empresas y aumento de paro que multiplicarían por cinco los que había entonces.
Viviremos tiempos de millones de parados, de huelgas y de altercados en las calles. Los policías se esconderán, los ciudadanos buenos serán atacados para silenciarlos y los emprendedores sólo emprenderán la huida. No vienen tiempos de coyuntura, es una crisis sistémica. Muchos querrán llamarla crisis durante mucho tiempo, pero otros, los que aquí seguiremos, sabremos mucho antes que los demás que eso no será una crisis sino un cambio rotundo de modelo social y económico. Espero equivocarme en lo que interpreto y no me atrevo a escribir. Un país que verá caer bancos, que se disfrazaran con fusiones o con lo que sea pero que al final en 2013 o 2014 o incluso después todos tendremos que pagar. En esta Era de la avaricia, el horizonte se nos presenta oscuro. Durante tres o cuatro años pintarán bastos. Los españoles han saqueado su país, cuya realidad económica vive bajo un estado lisérgico permanente.
Los efectos de este tripi gigante acabaron y ahora, la política y sus actores, deberán gestionar el enorme chasco. El sueño ha acabado y el despertar es como una garrafa de agua helada. Ningún político fue lo suficientemente suicida como para avisar de lo que se avecinaba pues hubiera certificado su derrota electoral. ¿Quién iba a votar a alguien que garantizaba la mayor crisis económica de los últimos cincuenta años y sus recortes y subidas de impuestos sin compasión? Que alguien les explique que no es una crisis. Que es hora de liderar un nuevo mundo. Y se lo advertimos, la cosa se puso más fea en los circuitos bancarios, en los ayuntamientos y sus derivados. Hoy todo eso es ya una evidencia y el peso de lo cotidiano es tan alto que no podemos ni respirar a pesar de que me rebelo contra todo ese malestar tatuado de manera transversal y espero poder retomar mi espíritu optimista y trasladárselo a mis socios, colaboradores, amigos y clientes.
No todo será malo. En muchos casos, la estrechez resultante provocará que algunos servicios que hasta la fecha se hacían sin mesura, deban adaptarse a los nuevos y gélidos tiempos. Las corporaciones municipales que quieran apostar por un valor en el servicio público deberán modificar sus objetivos si estos son faraónicos o desmedidos. Procurarán, los que puedan, atender exactamente a las necesidades de sus vecinos. El entendimiento por mancomunidades será uno de los efectos inmediatos a esta nueva situación. Algunas poblaciones que ahora no puedan afrontar la construcción, por ejemplo, de un polideportivo de según que dimensiones o coste de mantenimiento, podrán asociarse con otras para afrontar el proyecto con garantías de uso y equilibrio económico. Esto es diferente, duro y poco electoral pero no habrá otro remedio. Lo bueno que conlleva es que el dinero público deba invertirse de un modo mucho más eficiente.
Aun recuerdo la noche de hace un año en la que hablé con un buen amigo que vivía en aquel entonces en Grecia y que dirigía una de las empresas más importantes de Tesalónika. Me decía: “ahora me dedico, tras desayunar en casa de mi madre, a tirarle piedras a cualquier coche oficial que pase frente a mi”. Me dijo que así era hacía tiempo, que lo ejecutaba en equipo y rodeado de parados y embargados cada día durante cuatro o cinco horas. Unos días después publiqué algo que me confesaba otro amigo. Este era directivo de una entidad financiera española y decía que “si la gente supiera la verdadera liquidez que tiene el sistema no se lo creería”. Y a todo eso, hace un año, un 15M, la gente salió a la calle y se habló mucho de ello. Algunos regresaron a sus ordenadores, otros a sus reuniones de barrio y la mayoría a un limbo líquido donde se regeneran las pasiones.
El asunto es grave, ahora lo dicen todos los medios. Mucho más tarde de lo que hubiera sido de agradecer. Tal vez, con algo de tiempo, la gente podría haberse buscado la vida y no estar ahora en este barrizal cada vez más siniestro. Seguimos dando vueltas al mismo circuito y ese ahora ya es un cortocircuito que evidencia la majestuosa incompetencia de cuantos nos han dirigido en las últimas décadas y de cuantos se creyeron que la bonanza sobre la especulación no tiene fin. Lo que vivimos es un robo organizado en concepto de socializar las pérdidas y legalizado por la subida de impuestos que no estamos preparados para soportarla ni en el tiempo previsto, ni en la intensidad prometida, y menos para compaginar un crecimiento económico que pueda salvar todo esto a medio plazo. Por mucho que hagamos, el agujero es tan profundo y oscuro que nos engulle inapelablemente. Les pasó a irlandeses, griegos y portugueses y nos va a pasar a nosotros, a los italianos, belgas y derivados. En ese planteamiento de incerteza dramática hay que poner los tacos y preparar el punto de partida. Un nuevo mundo, una nueva oportunidad.
Esto lo escribo, peleando y arriesgando mi patrimonio otra vez, mirando desde las nubes el majestuoso Océano Pacífico, pensando lo lejos que queda todo, incluido mi hijo de casi siete años y recordando sus palabras en Viber: “papá, ¿cuándo terminará la crisis mundial?”. Le he respondido: “hoy”. Esto termina cuando a cada uno de nosotros se nos meta el gusano obsceno de la rabia, de la revolución personal y de las ganas de tomar las riendas de nuestra propia vida. “Me da igual lo que digan que harán por mí, yo sé lo que yo voy a hacer: emprender”.
Que no nos engañen más. Que le digan a todos que no tienen la más remota idea de cómo desmontar ahora el desastre que han organizado. Primero vertiendo dinero sin reparo, ahora retirando los estímulos, luego acelerando la modificación del sistema financiero, luego salvaguardándolo, primero hablando de reformas, luego de impuestos. Que acepten que el desastre es de tal calibre que no hay por donde cogerlo. Yo ya no cuento con ello y por eso me lo monto yo mismo y me lo organizo a mi manera, esperando el fracaso ilusionadamente.
La sociedad que no arriesga, no avanza. Hoy en día el valor de equivocarse parece un síntoma de final irrecuperable, cuando debería ser todo lo contrario. Sólo se hace gigante aquel liliputiense capaz de acumular errores. Un buen empresario no lo es hasta que no ha fracasado alguna vez. En Estados Unidos ese valor prevalece en cada proyecto que sus ciudadanos ponen en marcha. No hay fracaso malo, sólo hay oportunidad fallida. Hay más. En nuestro país y en algunos de nuestro entorno inmediato entrar en default es sinónimo de imposibilidad de poder afrontar otro reto emprendedor en tu vida. Las catalogaciones contra el histórico crediticio te amputan todas las opciones. Ese es uno de los motivos por los que, poco a poco, hemos ido deconstruyendo una sociedad que en su momento estuvo llena de vida.
Por mucho que nos llueva el mensaje a mi no me cuadra tanto discurso emprendedor. Los que ahora hablan de todo eso no son más que los creadores de tanta miseria prefabricada y tanta burguesía de plástico donde se esconde la escasa capacidad para emprender estratégicamente en muchos puntos de la vieja Europa, de producir competitivamente y de activar los pocos recursos que ya quedan en planes de estímulo que generen un nuevo modelo de crecimiento. Y en eso estamos cuando a uno se le quiebran las piernas pensando en sus ahorros, esos que tanto costaron reunir y que en gran medida dependen de “la buena gestión” de los que no vieron o negaron la que se avecinaba. ¡Menudos como para dejarles a sus merced nuestro capital!
Que obliguen a algún banco a digerir en sus balances a una caja con una agujero bíblico, no ayuda mucho a que el sistema cure sus deficiencias. Que se avance la creación de un banco malo no ayuda demasiado. ¿Alguien puede confiar a estas alturas que un banco repleto de basura financiera va a ayudar a que la realidad se convierta en algo mejor? ¿Alguien cree que tomar todos los activos tóxicos de la banca española y convertirlos automáticamente en los activos de una entidad de resguardo lo soluciona todo? ¿Nos toman por estúpidos? El banco malo se compone de las cosas que nadie va a pagar, de las deudas que se deben eliminar en los balances que evidenciarían quiebras y fallidas técnicas en algunas entidades. El gap es que se confía demasiado en que algún día alguien querrá esos activos malos. Si eso no pasa en un tiempo prudencial, la hostia será soberana y todos tendremos que refinanciar el macro agujero.
Foto: Reuters
¿Cómo afecta un rescate?
Acabo de aterrizar en el nuevo mundo. Estaré unos días trabajando con mi equipo en las sedes de Bogotá, Lima, Caracas, Miami y Boston. Nada más llegar cené con dos periodistas con los que tenía pendiente otra entrevista. Les preocupa no entender la situación de España en concreto y del continente en general. Por cosas de la vida, como consultor del BCIE he tenido que explicar lo mismo varias veces a mandatarios centroamericanos y también se hace complicado. Ellos que crecen en tasas que rozan las dos cifras tienen crisis sistémicas y de alto calado social cada diez o quince años. De hecho la mayoría disfrutan de la bonanza con el ojo puesto en el retrovisor que relata pobreza y miseria. No entienden de “crisis” subsidiada. Cuando ellos entran en crisis la gente se muere de hambre.
Hace dos meses que estamos trabajando en Bruselas en un anteproyecto cuyas bases estamos diseñando desde IDODI enmarcado en el famoso Seventh Framework Programme Europeo. Es gracias a ese contacto directo con alguno de los actores principales de la economía europea que he podido entender que la intervención de las finanzas españolas ya es un hecho desde hace un año, que el rescate se contempla como inevitable y que la subida del IVA por encima del 20% no será antes del verano pero si se planteará si los ingresos no aumentan por la “amnistía” o los gastos no se logran reducir por la vía imperativa. De hecho un buen amigo francés que ahora ocupa un alto cargo en la administración europea me confesó que Grecia, Portugal y España se devaluarían en valor nominal por la vía del IVA hasta límites que no podemos ni imaginar. Eso en semántica banquera viene a ser un 21% para España, e incluso más.
La gente se pregunta que quiere decir que nos rescatan. Incluso hay quien asegura que eso no va con ellos, que es un tema de macroeconomía, de políticos y economistas, que a las personas de bien eso no les afecta demasiado, que al final todo es una subidita de impuestos y algo menos de “cosas que te da el gobierno”. Pues ni el gobierno “te da nada”, ni las personas “normales” están exentas de notar en su estómago la patada del rescate, ni es un tema exclusivo de altos mandatarios. Un rescate e intervención no es nada parecido a lo que se siente cuando te sacan del mar en un bote salvavidas. La verdad es que a veces piensas que ya estabas bien ahogándote en el agua tan a gusto y “a tu bola”.
- Un rescate no es más que un crédito enorme que nos dejarán la Unión Europea y el Fondo Monetario Internacional. Con esa pasta se saldan las deudas del estado en default y justo a la mañana siguiente tienes la visita de la “troika”, es decir, unos comisarios de muy mala cara y de muy mal negociar.
- A partir de ahí los sucesos se precipitarán y nadie puede asegurar que serán la solución milagrosa pues no lo están siendo en ningún sitio donde se han instalado, sólo sabemos la que lían.
- Tomarán el poder un grupo de consultores y altos cargos de la UE, el FMI y el BCE. Su función será la de auditar todas las decisiones de tipo económico y presupuestario del ejecutivo de Rajoy y de sus derivados (como ellos lo denominan) autonómicos y jurisdiccionales.
- Para España tocarán equipos multidisciplinares con al menos un centenar de comisarios. A partir de ese momento España quedará oficialmente intervenida (le llamarán de otro modo como “asesoría de ajuste” o “grupo de apoyo presupuestario”) y entonces deberá corregir la situación a través de medidas “aconsejadas” por la “troika”.
- De no hacerlo no recibiremos el dinero que debe salvar todo el sistema financiero y el sistema económico por enlace. Recordemos que el Estado ha servido en bandeja toda su capacidad de endeudamiento y recursos a los bancos y cajas que estaban yertas en sus propios balances permitiendo que falsearan sus cuentas a cambio de “saltar al vacío” esperando que el paracaídas se abra.
- Como el triplete fantástico no se suele fiar de los países que rescata la pasta no la suelta de una vez sino que la va aflojando a medida que se van cumpliendo su “consejos”. Las medidas irán en la línea griega en cuanto a la reducción de funcionarios, salarios de la administración, peso de las autonomías, fusiones de municipios, subida de impuestos como el IVA, retoques en la reforma laboral y alguna cosilla más. Me pregunto como se lo tomarán los sindicatos.
- Por desgracia es casi inevitable que pase. El volumen del engaño en España en cuanto al balance del sistema financiero es comparable a las mentiras que Goldman Sachs inventó para que las cuentas de Grecia fueran adecuadas en el momento de integrarse a la Unión Monetaria.
- La banca española vale más por sus cuentas tóxicas que por las reales. Casi 200.000 millones de euros en hipotecas no serán devueltos a los bancos, lo que pone en fallida todo el sistema. Eso se deberá sumar a que la banca no ha dejado caer el precio todavía de la vivienda, algo que seguirá friccionando y, al final, resultando una evidencia solemne: el patrimonio con el que los bancos autorizan balances positivos son una quimera.
- Europa lo sabe. Si cae Portugal, que caerá pues se le pide que resuelva elementos estructurales de su economía en meses cuando eso no lo lograría ni un país escandinavo en años, cae España.
- El grado de exposición de la banca española al déficit portugués se dice que puede estar cercano a los 100.000 millones por derivados de segundo orden y no los 78.000 como hasta ahora se consideraba. Además, el crecimiento de la economía española vuelve a ser negativo.
- En Europa se contemplan cifras muy contundentes y en negativo para este trimestre pasado que no dejarían muchas opciones a la hipotética recuperación a medio plazo que pudiera retrasar el rescate.
- La austeridad en inversión y la necesidad de más dinero en la banca (y no para fluir crédito) seguirán reduciendo el radio del círculo vicioso en el que hemos caído irremediablemente. Finalmente se dice en Europa que el rescate de España es inevitable porque no lograremos equilibrar el déficit, porque el paro no dejará de aumentar y porque el talento huye de España ante la imposibilidad de prosperar.
- La nombrada “prima de riesgo” aumentará por una lógica cruel del mercado: es un “riesgo apostar a este caballo mal herido”. En definitiva, menos dinero, más recaudación hasta la extenuación, liquidación de servicios, reducción de peso funcionarial y alejamiento del crecimiento y del cambio del modelo de crecimiento.
Y a todo esto, recortamos 2.200 millones de euros en los presupuestos para I+D+i y nos desfilamos por el sendero oscuro de no saber que queremos ser de mayores. La fiesta terminó, toca recoger los platos, limpiar la sala y, sobretodo, ir hablando de lo que haremos con ese espacio para rentabilizarlo. Al parecer, investigar en nuevos modelos productivos no.
Aprender de Latam
Leyendo un artículo del Economy Weblog del Instituto de Empresa sobre lo que podemos aprender de Latinoamérica para salir de la crisis se me o ocurren tres o cuatro conceptos que por un lado coinciden y por el otro me son preocupantes. Existe una creencia entre algunos académicos de escuelas de negocios, políticos y empresarios de referencia de que estamos “todavía” en una crisis coyuntural. Hace unos pocos días tuve la ocasión de charlar con alguien metido en las tuberías del nuevo gobierno de Rajoy y me aseguraba que era sorprendente descubrir que tres cuartas partes de ese ejecutivo siguen pensando que esta tremenda situación está motivada por un ciclo y que es cuestión de tiempo que se vaya dando la vuelta.
Gente, que debería estar concretando el modo por el que nos adaptamos a un nuevo modelo social y económico, a un nuevo orden mundial y al sistema de relaciones global que nos llegará, sigue posicionado en una curiosa y peligrosa manera de pensar: esto se solucionará solo, por ciencia infusa, y que los recortes y ajustes, subida de impuestos y derivados servirán para preparar el camino. Obviamente estuvimos en manos de responsables con problemas para interpretar la realidad más absoluta y eso no parece haber cambiado demasiado.
Volviendo al tema de Latinoamerica me gustaría hacer referencia a diversos aspectos que no dejan de ser significativos. Primero que de ellos tenemos mucho que aprender, o por lo menos adaptar. Que no vamos a aprender nada con respecto a salir de la crisis pues no estamo en ninguna crisis y porque no es comparable lo que vivieron hace una década ellos con lo que estamos viviendo nosotros. Alguien muestra su desconocimiento del entorno del que habla y del escenario al que se refiere.
La emprendeduría latinoamericana es tan diversa como estimulante. En países como Colombia, Ecuador, Perú, Paraguay y en general el conjunto de todos ellos poseen un principio activo común: la falta de prestaciones sociales suficientes dinamiza la economía de guerrilla, esa en la que se mueven estos microemprendedores todos los días. No hay ayudas a la puesta en marcha de negocios, no hay gestión dirigida y subvencionada pero el crecimiento de todos ellos, a la sombra de la caída de los imperios occidentales, los llamados núcleos emergentes americanos como Chile o Brasil principalmente están girando hacia todo un nuevo escenario que acepta el capital externo como soporte a la oportunidad de emprender.
Es cierto que emprender en esos países requiere un espíritu determinado. El aeropuerto comercial más peligroso del mundo es el de Tegucigalpa, la seguridad es muy débil en El Salvador o Guatemala, procesos complejos en Panamá, inestabilidades en Bolivia y así el conjunto de ellos. He estado en todos y en cada uno de ellos hay cosas buenas, pero sobretodo hay gente extraordinaria.
Panamá, Costa Rica y toda Centroamérica en general responde también a ese principio de aprovechar cualquier resquicio que proporcione una oportunidad. La necesidad impide que nadie se duerma en el sofá social. Esa es la gran diferencia y la oportunidad que nos ofrecen desde allí.
En el Cono Sur y en todo el sur de América incluyendo incluso México pero algo de reticencias, la exposición a los debates económicos mundiales es escasa para los que quieren poner en marcha proyectos. Es un placer tratar con aquellos que todo el día están arrancando proyectos por modestos que sean. Otra cosa es querer emprender con ellos. La verdad es que implementar negocio en esta parte del mundo tiene grandes dificultades y aunque también supone retos en lo personal y en lo profesional, lo más destacable es el conocimiento de un nuevo escenario para desarrollar proyectos.
La oportunidad son sus desequilibrios, unos desequilibrios que irán desapareciendo y que se convertirán en el patrón de cambio económico. Ahora son ellos los que empujan y los que piden estímulos externos. Mientras medio mundo se movía en cifras negativas, crecimientos que superan el 8% habitualmente.
Lo bueno de viajar es que descubres que aprendes. Es sencillo. Muchos europeos o norteamericanos viajan por el planeta con la voluntad de internacionalizar sus proyectos, de crear en esos países, pero al final resultará que en Latinoamérica especialmente, donde fuimos algunos a desarrollar proyectos de emprendeduría digital y de la Nueva Economía, notando y creyendo que exportaríamos know how, acabaremos aprendiendo más que enseñando. Cuando nuestra sociedad más inmediata se levante del sofá y descubra que tiene que afrontar retos en el exterior deberá saber que, a otros países aparentemente menos desarrollados que nosotros no se va a enseñar, se va a aprender, y en el mejor de los casos a comprender.
Está claro que podemos mostrar usos y estrategias que no se conocen en esos países para poner en marcha negocios, pero las dosis de realismo y de uso práctico de todo ello suponen toneladas de modestia que los europeos necesitamos digerir si queremos hacer negocio en América latina.
La crisis acaba hoy
En el primer mes de 2012, 30.458 trabajadores autónomos españoles se han dado de baja en los registros de la Seguridad Social, un dato idéntico a la pérdida en todo el completo del año pasado. Todavía hay quien considera que esto es el proceso natural de una crisis que se está alargando mucho. Es triste interpretar que los medios y derivados ahora se dediquen a darle un “margen de confianza” al nuevo ejecutivo o a utilizar “buenismos“ porque el gobierno recién estrenado utiliza términos como “emprendedores”, reformas en todas direcciones y anestesia variada.
Los “nuevos” saben que tienen poco tiempo y por eso van rápido. Saben que, o acometen todas esas reformas rápido o todo se les vendrá encima. De momento el discurso “nos hemos encontrado esto hecho un solar“ funciona, pero no lo hará demasiado tiempo. Lo inevitable es imposible de evitar por propia definición.
Tengo la impresión que lo sucedido en Grecia pasará aquí. Un gobierno se montó un tinglado que no hubo manera de soportar, la derrota electoral masiva de la oposición constante llevó a otros al gobierno, las alabanzas de Europa hacia las reformas del nuevo gobierno heleno fueron unánimes pero a medida que las exigencias caían sobre las espaldas de los ciudadanos el ejecutivo se fue arrugando hasta que Europa decidió “eliminarlo” y sustituirlo por otro mucho más tecnócrata y sumiso. Una vez cayó ese segundo gobierno, las reformas entran como supositorios y cada vez es más ancho el espacio por el que a los pobres griegos les hacen un “idem“.
La desaparición indiscriminada de autónomos no es más que la evidencia de que el mercado está seco, que la máquina se para. No hay mucho más. Hoy estoy entre Miami y el Pacífico latinoamericano atendiendo proyectos en este nuevo escenario económico vibrante, escuchando como casi medio millón de españolitos ya han emigrado en lo que llevamos de vía crucis, que la mayoría son gente formada que ha decidido trabajar de lo que sea y donde sea con la esperanza que algún día en esos países puedan trabajar de “lo suyo”.
Médicos sirviendo cafés cerca de mi casa en Covent Garden y reconociendo que esperan poder entrar al coste que sea en algún hospital londinense, arquitectos poniendo gasolina en surtidores israelíes con el firme deseo de que en alguna nueva promoción sean precisados sus servicios, periodistas haciendo tortitas en algún restaurante de Miami rezando por un contrato en Globovisión. Leo que en Noruega los españoles que se fueron están atrapados, sin opciones y sin dinero. Lejos de todo y sin nada. Sé que en Centroamérica muchos han perdido lo que les quedaba y en Estados Unidos la sangría no es menor.
No voy yo a negar que lo que hay que hacer es lanzarse al abismo, pero sin embargo no está de mas calibrar y entender quienes somos, algo que ya no tiene mucho que ver con quienes éramos. En América cada vez se oye más eso de: “¿eres español?, ¿y tú que dices que sabes hacer mejor que nosotros?“. Por desgracia no nos enteramos de que las lecciones ya no las dan los de antes, nos toca ahora atender y hacerlo en serio.
En los próximos meses nos empacharemos de la “Ley de Emprendedores” y de la “asignatura sobre emprendeduría” que nos van a tirar contra la cara desde muchas administraciones educativas. No hagan caso, el problema no se arregla con envoltorios. Esperemos que esa ley se convierta en un instrumento de fomento y desarrollo de las nuevas iniciativas empresariales, que impulse las dinámicas que cambien el modelo de crecimiento de este país, pero me cuesta creer en la bondad del discurso bien empaquetado en papel celofán de color naranja y azul.
Me cuesta por tres razones:
Mientras se habla de impulsar la economía emprendedora se sigue derrochando a paladas los recursos públicos a través de subidas impositivas directas e indirectas para financiar a un sistema bancario que quebró hace años.
Mientras se llenan la boca de “medidas que nos lleven a la senda del crecimiento económico” se siguen liquidando todos los elementos que podrían poder hacer eso precisamente. Está como aceptado que los recortes masivos e indiscriminados es lo único que se puede o debe hacer (Merkel no permite muchos juegos alternativos) y por ello se hacen. Lo acepto, pero lo que no puedo asumir es que eso sea, ni por asomo, el motivo de la recuperación económica. Que hablen claro y digan que los ajustes presupuestarios son para que el tinglado no se venga abajo cuando Europa nos hostie a dos bandas como hizo con los griegos y que eso no estimula ni a la burra de Dorotea. Aquí no hay nada que estimular, sólo nos queda esperar.
Mientras los españoles huyen como liebres en todas direcciones buscándose la vida en este país siguen habiendo tipos con jubilaciones a los 53 años, retiros millonarios y pactos de salón que ponen a unos en casillas de salida privilegiadas a ocho meses de la debacle.
En definitiva, que la innovación, el mercado, el crecimiento y las reformas no van juntas. De momento no. Por desgracia tampoco va nada de ello asociado a hablar claro, asumir la realidad e informar a los españolitos que lo que deben poner a buen recaudo, sobretodo, es su dinero. Los que no lo hagan deberían de atender a como montar un negocio que asuma como indispensable sus opciones de vender en el exterior.
Para que las ideas fluyan y no nos tilden de pesimistas, a partir del lunes y de forma no lineal os iré contando en que consisten, como funcionan y que hacen las últimas empresas en las que estoy invirtiendo o he fundado directamente en estos dos años últimos y otras que, aun no estando directamente ligado, he podido asesorar o mentorizar y que ahora son compañías internacionales. Lo haré con el firme deseo de acercar modelos que están funcionando y en el modo en el que hemos dado la vuelta a formas de trabajar o vender para adaptarnos a los nuevos tiempos, duros pero apasionantes.
Para los que crean que esto de viajar es todo delightful me gustaría compartir un rato amargo. Escribo mirando el Océano Pacífico, pensando lo lejos que queda todo, incluido mi hijo de seis años y pensando en lo último que me ha dicho por Viber hace un buen puñado de horas: “papá, ¿cuándo terminará la crisis mundial?”. Le he respondido: “hoy”. Creo firmemente que todo esto termina cuando a cada uno de nosotros se nos meta el gusano obsceno de la rabia, de la revolución personal y de las ganas de tomar las riendas de tu propia vida. Me da igual lo que digan que harán por mí, yo sé lo que yo voy a hacer. Eso es lo único real, lo otro son quimeras.
No tiremos la toalla
Lo que se comenta estos días en Londres es terrible. Se habla de cómo las familias denunciaron a sus hijos tras los sucesos ocurridos en agosto por miedo a perder subvenciones y ayudas. Familias desestructuradas con apartamentos con pagos mensuales de apenas cien libras y que cobran subsidios de todo tipo recibieron la amenaza de que si descubrían que sus hijos estaban implicados en los incidentes podrían perder todos esos beneficios a menos que hubieran sido denunciados por sus propios padres antes. Es lo que me explican mis vecinos de Covent Garden que aseguran que sin esa apreciación es imposible creerse que la policía hubiera sido capaz de detener a los casi dos mil implicados que dicen haber detectado.
Con noticias como estas a uno se le quitan las ganas de escribir. Quiero agradecer la dedicación de muchos lectores que han seguido dándose cita en este blog cada día a pesar de no haber ningún post nuevo y darle vida con vuestros comentarios.
El motivo del silencio han sido varios. Por un lado, cierto, el cansancio sobre la actualidad económica. Agosto fue un mes dramático como advertí un tiempo antes y muchos son los que escriben ahora sobre lo mal que va todo. Por otro lado mi descanso veraniego, que aunque nunca es demasiado intenso, si lo requiero por unos días. También el inicio y estructuración de dos nuevos libros, uno técnico sobre internacionalización y otro mucho más emotivo sobre emprendedores han copado mi capacidad de escritura. Tengo un límite y roza las diez o doce páginas diarias que se fueron con esas tareas. No quedó espacio intelectual para el blog.
Sin que quiera justificarme os comento que parte de ese silencio se debe a una imposibilidad manifiesta de hacerlo todo. He abierto dos sedes de mis empresas en América y he fundado una nueva empresa en Europa. En unos días actualizaré el blog y sus enlaces y os comentaré detalles pues algunos estoy seguro pueden ser de interés para muchos de vosotros.
Permitidme no obstante, para dar cuerpo a este “regreso”, cinco consideraciones que marcarán este curso en este espacio digital.
- Seguiré analizando la realidad pero desde un punto de vista distinto. Hablar del fin de un modelo económico puede entenderse de muchos modos, pero para los que estamos todo el tiempo intentando poner en marcha proyectos no puede ser más que un espacio de oportunidad. Estoy convencido que las cosas se van a poner peor, lo llevo diciendo hace mucho, pero eso no va a limitar mi pasión por emprender donde sea.
- Seguiré denunciando aquello que, no obstante, me parezca mezquino, injusto o que insulte a la inteligencia. No entraré en las obviedades que ahora se escuchan en tertulias de radio o se puede leer en columnas de diario. Se pueden leer ahora miles de aportaciones catastróficas sobre el presente y futuro por parte de los mismos que insultaron a gente que, como yo, denunciamos lo que se avecinaba, avisamos a los que quisieron escuchar para salvar sus muebles y anunciamos que se podía salvar lo peor.
- Continuaré ejerciendo la didáctica con el mismo valor y sentido que he hecho durante más de ocho años. La realidad económica debe mirarse desde la distancia y al hacerlo, entenderla, es algo más complejo. Volveremos a descifrarla aquí.
- Daré las claves de nuevas oportunidades de negocio según mi criterio, de cómo la nueva economía digital o la innovación empresarial es capaz de generar un nuevo patrón de riqueza y gestión del conocimiento que permita sobrevolar esta situación actual. Hablaré de internacionalizar, de emprender, de procesos y de adquisiciones. Lo haré ejemplificando con mis empresas, mis proyectos, pero también con la de amigos y socios.
- Intentaré con toda mi alma ayudar a otros a despertar de nuevo a toda una masa social esclerotizada que a mi entender es la principal y mayor herida que nos queda de todo esto. Tengo la terrible sensación que muchos ya han tirado la toalla, que aquellos que gritaron hace unos meses que “con ellos no iban a poder” ya no tienen combustible para continuar y que, sin posibilidades para escapar, se han rendido a su suerte.
Como sucede en el Reino Unido, la sociedad ha perdido el sentido y está dispuesta a denunciar a un hijo por no perder un modelo de vida subsidiado, pues en muchos casos, es el único modelo posible. Estamos jodidos y no lo dejaremos de estar si seguimos atendiendo gustosos a la sodomización intelectual que, en dosis, nos siguen practicando desde muchos estamentos de poder. Ejemplos:
- Decir que en Grecia hay posibilidades de que “salga del Euro” es tomarle el pelo al respetable pues ya no están en la moneda única, y no lo están hace meses. Nadie puede, en Grecia, comprar nada vía pago transaccional desde una entidad helena pues ningún banco externo la acepta. Están atrapados y lo saben todos los que trabajan en ese sector.
- Advertir que Grecia está cerca de la quiebra pero que aun le queda alguna opción de salvarse por no se que enlace con la banca francesa, también es algo lírico. Atenas sabe que no queda un céntimo líquido en su sistema financiero, saben que cualquier ayuda se va por el retrete pues no hay manera de impedir que los griegos busquen la manera de sacar su dinero del país por miedo al default. No hay salida y el mercado lo descontó hace meses. ¿Es posible que un bono a un año tenga una rentabilidad del 104% y nadie se ponga a reír?
- De España se escapan cada mes casi 2.000 millones de euros. El sistema se va secando y cada vez de un modo más rápido. La liquidez real se evapora y se sustituye por otra que proviene de la compra de bonos patrios por parte del BCE saltándose todos los efectos normativos y lógicas económicas. Comprar lo que fabricas tú mismo suele acabar muy mal.
- La FED reconoce que se ha equivocado comprando deuda pública. Ahora “han descubierto” que no pueden hacerlo eternamente. De verdad a veces me pregunto que hacían mientras en clase el profesor explicaba que 2+2 son 4. En Europa es cuestión de tiempo que se haga un reconocimiento similar.
- Que la subida de impuestos en países como España va a ser olímpica es una obviedad y que nadie se atreve a comentarlo en período electoral también. Aquí lo hemos comentado muchas veces, pero hasta ahora no se había reproducido de manera eficiente.
- Esa subida de impuestos, la rebaja de servicios, la caída del consumo por la reducción de capacidad adquisitiva, el aumento de paro, la baja competitividad, el escaso cambio de modelo, la sistemática moderación del crecimiento en términos globales conducirán a un escenario más severo. De eso hay culpables y deben pagar.
- Pasan cosas que son humillantes. Hoy escuchaba a un hombre como López Garrido decir que “no ve hoy por hoy riesgo de quiebra en Grecia y que considera el rescate como algo que está funcionando”. El actual secretario de estado para la unión europea vive en otra realidad paralela en el mejor de los casos o algo mucho peor. El tipo destacó el “buen funcionamiento” del programa de rescate y dijo que estaba seguro que todo iba a salir bien. Es terrible pensar que este hombre nos representa en algún ámbito. Atenas apenas puede pagar nóminas y pensiones a menos que se les entregue el sexto tramo de los 110.000 millones irreales de euros que le prometieron a los pobres griegos para salvar su Grecia de juguete.
Sigo con este desorden intencionado. Resulta que el Banco Central Europeo compró deuda durante todo el agosto sobretodo a España e Italia y poco a poco ha ido viendo como los efectos se iban diluyendo. Además se han dado cuenta que si siguen con esa acción nos vamos a comer una inflación de narices a medio plazo. Para eso hoy se han dedicado a subastar 143.000 millones. Resulta que el BCE ha sido el principal comprador de la deuda con la que España e Italia han ido pagando sus facturas a medida que los vencimientos que no podían cubrir llegaban. ¿A que parece evidente el desenlace en unos meses? Imagina que en tu casa tu compras la deuda de tu hijo. Que además cada vez que se la compras es para que con ese dinero pague la deuda que él tiene contigo. ¿Sigo?
Tengo la impresión que el mercado ha sido dopado durante años con inyecciones de liquidez, compra de bonos y otros derivados y que cada vez los efectos de dicha droga en el sistema hace menos efecto y por menor tiempo. Pronto ese chute no hará efecto ninguno pero será imprescindible para seguir vivos. Como un yonki que se droga para no sufrir el síndrome de abstinencia pero que ya no logra ningún efecto significativo con las sucesivas dosis.
Pero tengo otra teoría. Considero que se está dejando caer todo el sistema a cámara lenta. Lo hacen de este modo conscientemente a sabiendas que no hay solución. Esperan que en la medida de lo posible, el repunte de la economía mundial afecte a lo nuestro desde Latinoamérica, China y otros. En eso están. Prefieren que la caída definitiva de algunos grandes países sea desde el escalón más bajo y no desde el más alto. Así, descontando esas quiebras, el ruido y dolor será menor. El contagio puede evitarse si al mismo tiempo el mundo reacciona. Espero que esta vez si me equivoque pues si vuelvo a acertar estamos ante la antesala de la peor recesión jamás vista.
Hoy alguien me pedía que replicara algo que escribí hace más de un año en francés y que también salió publicado en español. Concretamente es un texto que viene muy bien hoy. ¿Me permitís que lo replique ahora?
Desde hace mucho, mi vida gira en torno de la estimulación de negocios, viabilizar proyectos y arrancar aventuras empresariales. Lo hago aquí o donde sea, no me paro, no pienso detenerme frente a un enorme castillo de naipes que se desmorona. Conozco decenas de personas con ideas suficientes para cambiar el mundo. El problema no es tanto si estamos o no aportando soluciones, no nos toca seguramente, ni tampoco si denunciamos o no a los estamentos superiores, cosa que, como ciudadano libre, pienso seguir haciendo hasta el día que no me quede una gota de oxígeno. El asunto es como se denuncia a los que denuncian. Lo grave es vivir todos los días con el estigma de ser un agorero que no acepta lo impensable de nuestro destino inminente. La gravedad de la situación actual era evitable y sí se pudo prever. A la tertuliana que dijo que la reducción del déficit era algo que se tiene que realizar inevitablemente pues era algo que nadie pudo pensar cuando se empezó a estimular la economía, le recomendé leer la hemeroteca de este mismo medio digital o los archivos de un buen puñado de blogs. Ya se denunció qué significaba actuar con tal retraso y qué variable ponía en marcha utilizar a Keynes sin control.
Ha llegado el momento de denunciar a los que han arruinado el futuro de mi hijo, los que ganaron premios suecos asegurando que ese era el mecanismo para evitar la recesión. Ahora toca despacharlos y dejarlos en evidencia. A los que no han tenido narices para evitar esto, gestionarlo adecuadamente o informar a la gente para que tomaran las riendas de su destino, no podemos ofrecerles el beneplácito ahora de comandar la salida de este laberinto.
A cada uno su oportunidad, el desastre no lo puede arreglar quien lo ha provocado, o como mínimo, lo ha amplificado. A mí no me toca dar soluciones, aunque las pueda aportar, a los pobres ciudadanos que tuvimos la decencia de denunciar la enorme bola de estiércol que algunos estaban fabricando, nos queda buscarnos una salida de emergencia. En la medida de lo posible, nos toca perder el menor tiempo para afrontar nuestra propia vida.
En menos de seis meses vivir en Europa va a ser un calvario. Sobrevivir en una España intervenida será un infierno. Sueldos a la baja, impuestos progresivos, aumento de sanciones administrativas hasta el ridículo, colectivos diferentes en protesta, aumento de paro, economía de mercado en parada técnica, administraciones en insolvencia, cajas simulando fusiones para alicatar a la valenciana sus boquetes con el fondo de rescate de entidades en quiebra, reducción de estímulos a la investigación y a la creación de un modelo de crecimiento amparado en las nuevas tecnologías, cierre de grandes empresas vinculadas a la obra pública y descapitalización del sector financiero por parte de depositarios foráneos y locales.
Ese listado es de todos conocido. Por eso, cuando alguien asegura que decir todo ello es ser catastrofista, entonces le acribillo a ideas, una detrás de otra. Ideas que me llevan a pelear contra todo eso, a buscar la oportunidad, a buscar valor, a diseñar modelos de negocio inexistentes, a versionar los que tengo, a darle la vuelta a la caja y dejar que caiga lo ineficiente, a pactar con mis socios, trabajadores, amigos, competencia, proveedores, universidades, administraciones, agentes, con quien sea para sobrevivir en este puñetero barrizal en el que se está convirtiendo emprender en España.
Llevo en crisis toda la vida. Lo he hecho sin quejarme. Emprender es estar en crisis constantemente, pues cuando tienes algo, lo inviertes, cuando por fin un proyecto está maduro, generas otro. Sin embargo no aceptaré bajo ningún concepto que alguien pretenda callarme, taparme la boca o condicionar mis críticas y avisos sobre la que se nos viene encima definitivamente y los responsables de su mala gestión, con la advertencia de que eso me convierte en “catastrofista” o en “el quinto jinete de la Apocalipsis”. Eso es una trampa, un cepo de mal tertuliano. Justifica y ampara a los que debieron hacer algo, permite que la gente siga en la inopia ahora que empieza el mundial que nos alejara de nuestra desdicha y empuja hacia una miserable oferta de recortes en las capacidades de cada uno de sentirse libre de decir lo que piensa.
Lecciones de moralina buenista las justas. Ahora que incluso los columnistas de todo signo se han dado cuenta que la crisis era algo real, que su envergadura era descomunal y que a lo que estamos abocados es a un cambio sistémico, algunos se dignan a criticar a los que denunciamos una hipocresía lírica de periodistas descolocados por la situación actual. Ahora ya parece que han encontrado justificación y amparo. La culpa es del liberalismo. Es de juguete, pero les sirve. Los que llevan años viviendo de un momio protogubernamental pretenden dar lecciones baratas de ética informativa.
Hay cuatro maneras de ver el vaso. Medio lleno si eres optimista, medio vacío si eres pesimista, medio vaso que sobra si eres un tipo racional y medio vaso por llenar si eres un emprendedor. La primera es la manera en como ven el recipiente algunos de los que están apunto de perder su trabajo o pagar más impuestos que nunca. La segunda forma es la de los que la situación les ha vencido ya. La tercera es la modalidad menos arriesgada y suele adoptarse por aquellos que se huelen que lo peor está por llegar. La última es la mía. Lo llenaré con agua española o con la que sea, pero el vaso va a rebosar de agua tarde o temprano, se pongan como se pongan unos y otros. Me encanta el oxímoron ese de la destrucción constructiva o la del emprendedor catastrofista. ¿Tú que eres?
#internacionalizando
Hoy estoy en Bogotá. Me trae por aquí la estimulante tarea de ayudar a empresas europeas y norteamericanas a internacionalizarse. Quisiera decir que, la decisión de trasladarse al exterior para afrontar el reto de vender en otros países no es una huida, no es una escapada, es una opción de crecimiento totalmente legítima. Las modalidades pueden ser muchas porque depende del tipo de negocio es mejor buscar socio local, instalarse o no, exportar o el e-commerce.
El sistema que yo aplico es muy simple. Escucho a la empresa, la analizo con mi equipo, creamos una hoja de ruta que busque modernizar el proceso empresarial si fuera preciso y generamos un ecosistema de relaciones y elementos que puedan ayudar a salvarse de la quema europea. No siempre es posible y entonces lo digo y no seguimos, en otros es una maravillosa experiencia. El final se revierte en una métrica que garantiza el éxito. Es un modelo parecido al que algunas instituciones públicas ofrecen a pymes y emprendedores, pero con un grado de éxito tremendamente superior por parte nuestra que en la que ofrecen esos institutos. La diferencia entre nosotros y esos organismos públicos que dicen ayudar a internacionalizar es que los responsables de ejecutar tu modelo de internacionalización suelen ser funcionarios o empleados públicos que jamás montaron un negocio y que no consideran un factor que no está en los papeles sino en el corazón: el riesgo y el fracaso. En nuestro caso, atender esos elementos, es el factor diferencial.
Mi especialidad es Latinoamérica y USA, la de mi socia principal los países árabes y China. Otros miembros del equipo son capaces de modelar proyectos en zonas diversas como países del este o mercados complejos en África. La compañía que nació de la unión de diversos consultores especialistas en innovación y desarrollo corporativo está en fase de constitución formal, aunque ya hace más de dos años que operámos todos juntos como freelancers ofertando este servicio. En pocos más de un mes esta compañía será una realidad formal.
Pero, ¿cómo es eso de emprender en Latam?
La emprendeduría latinoamericana es tan diversa como estimulante. En países como Colombia, Ecuador, Perú, Paraguay y en general el conjunto de todos ellos poseen un principio activo común: la falta de prestaciones sociales suficientes dinamiza la economía de guerrilla, esa en la que se mueven estos microemprendedores todos los días. No hay ayudas a la puesta en marcha de negocios, no hay gestión dirigida y subvencionada pero el crecimiento de todos ellos, a la sombra de la caída de los imperios occidentales, los llamados núcleos emergentes americanos como Chile o Brasil principalmente están girando hacia todo un nuevo escenario que acepta el capital externo como soporte a la oportunidad de emprender.
Es cierto que emprender en esos países requiere un espíritu determinado. El aeropuerto comercial más peligroso del mundo es el de Tegucigalpa, la seguridad es muy débil en El Salvador o Guatemala, procesos complejos en Panamá, inestabilidades en Bolivia y así el conjunto de ellos. He estado en todos y en cada uno de ellos hay cosas buenas, pero sobretodo hay gente extraordinaria.
Panamá, Costa Rica y toda Centroamérica en general responde también a ese principio de aprovechar cualquier resquicio que proporcione una oportunidad. La necesidad impide que nadie se duerma en el sofá social. Esa es la gran diferencia y la oportunidad que nos ofrecen desde allí.
En el Cono Sur y en todo el sur de América incluyendo incluso México pero algo de reticencias, la exposición a los debates económicos mundiales es escasa para los que quieren poner en marcha proyectos. Es un placer tratar con aquellos que todo el día están arrancando proyectos por modestos que sean. Otra cosa es querer emprender con ellos. La verdad es que implementar negocio en esta parte del mundo tiene grandes dificultades y aunque también supone retos en lo personal y en lo profesional, lo más destacable es el conocimiento de un nuevo escenario para desarrollar proyectos.
La oportunidad son sus desequilibrios, unos desequilibrios que irán desapareciendo y que se convertirán en el patrón de cambio económico. Ahora son ellos los que empujan y los que piden estímulos externos. Mientras medio mundo se movía en cifras negativas, Crecimientos que superan el 8% habitualmente.
Lo bueno de viajar es que descubres que aprendes. Es sencillo. Muchos europeos o norteamericanos viajan por el planeta con la voluntad de internacionalizar sus proyectos, de crear en esos países, pero al final resultará que en Latinoamérica especialmente, donde fuimos algunos a desarrollar proyectos de emprendeduría digital y de la Nueva Economía, notando y creyendo que exportaríamos know how, acabaremos aprendiendo más que enseñando. Cuando nuestra sociedad más inmediata se levante del sofá y descubra que tiene que afrontar retos en el exterior deberá saber que, a otros países aparentemente menos desarrollados que nosotros no se va a enseñar, se va a aprender, y en el mejor de los casos a comprender.
Está claro que podemos mostrar usos y estrategias que no se conocen en esos países para poner en marcha negocios, pero las dosis de realismo y de uso práctico de todo ello suponen toneladas de modestia que los europeos necesitamos digerir si queremos hacer negocio en América latina.
¿como Saldar La Deuda?
Los 223.000 millones de deuda que vence en 2010 y que debe negociarse por consiguiente en los próximos meses ya está colocada. Si, como suena, ya está toda prácticamente garantizada. Seguro que pensaréis que me he vuelto loco. Podría ser, pero la otra opción es que hubiera presenciado el proceso de intercambio que en el mercado de bonos empieza a trasladarse, las órdenes de los gestores nacionales y las directivas a largo que se están empezando a enlazar. A parte alguna conversación con fuentes que considero fiables interpreto que la deuda por negociar está garantizada hasta 2012 y que la comprará la propia autocartera de la banca española, que a su vez la recolocará en otros países donde muchos de esos bancos tienen capacidad de intermediación y emisión.
Si lo prefieren no me hagáis mucho caso, es una teoría amparada en lo que he ido detectando, pero como en otras ocasiones podría ser que me equivoque. A riesgo que me digan que siempre evito dar las pistas exactas, siento no poder dar nombres, datos exactos, ni más detalles. Paso de más problemas. Ahora bien, esto podría estar determinando una buena base de colaboración entre banca y gobierno a fin de quitarse las castañas del fuego los unos a los otros y trasladar nuestra basura a otros mercados. La pregunta es, ¿se salda una deuda pública así? ¿y que pasa con la deuda privada?